La difícil situación económica viene impactando severamente al grueso de comerciantes dedicados a la elaboración de artesanías autóctonas. Para no declararse en quiebra y sostenerse en medio de las dificultades, los indígenas han tenido que elevar el costo de los productos, revela Juana María Pérez Reyes.
En la zona Arqueológica El Tajín, donde esta asentada la cultura totonaca, más de cien artesanos totonacas ofrecen diferentes artesanías que van desde flautas, tambores, llaveros, figuras de vainilla, camisas, vestidos tejidos a mano, sombreros, lentes y una gama de recuerdos al turismo.
“No es la temporada lo que ha venido a encarecer las artesanías, son los costos de insumos lo que ha dado margen a subir los precios cuyas ventas de por si han resultado regulares, pero esperamos mejores ingresos en lo que resta de Cumbre Tajín”, expresa la comerciante.
Llegar al Tajín en estos momentos o en cualquier sábado o domingo es llegar a un mundo mágico donde la música de flautas, tambores y el aroma a incienso brota de los comercios artesanales.
Sin embargo en este 2009 a pesar del enorme número de turistas nacionales y extranjeros, las percepción de ingresos para el comercio no ha resultado como lo esperaban ante el efecto espejo de la economía, como lo comentan comerciantes artesanos.
El día cumbre para el comercio es el 21 de marzo, el equinoccio de primavera que atrae a miles y miles de visitantes, es ese día y el domingo, las fechas en las que los artesanos indígenas, esperan ver aumentadas sus ventas.