IPAX prefiere hacer sorteos en Emiliano Zapata que dejar la ganancia al Ayuntamiento xalapeño

El comisionado del Instituto de Policía Auxiliar y Protección Patrimonial, Juan Antonio Nemi Dib, informó que el segundo sorteo de este organismo se realizó en el municipio de Emiliano Zapata, porque la ley de ingresos de Xalapa, exige que del total de los ingresos netos de todos los juegos y sorteos que aquí se realicen, se debe pagar un impuesto del 20 por ciento.

Entrevistado previo a la entrega de los 75 premios de la cooperativa de consumo de los policías del IPAX, el ex diputado federal comentó con ironía que “nos hubiera gustado dárselos a la tesorería municipal pero dejaríamos a los policías sin computadoras y electrodomésticos, que queremos comprar para elevar el nivel de vida de los uniformados y para no violar la ley del municipio xalapeño.”

En presencia del interventor de la Secretaría de Gobernación y de un notario público, para la entrega de 3 vehículos nuevos, 50 televisiones y otros premios de consolación, quien fuera Subsecretario de Desarrollo Político, señaló que el IPAX ha realizado dos sorteos; en el primero sólo vendieron 2 mil boletos y en éste, 6 mil 300 a un costo de 130 pesos; la mayoría fueron comprados en abonos por los propios trabajadores.

Abundó que de esta manera que el IPAX se capitalizó con medio millón de pesos que se destinará para la compra de 300 equipos de cómputo con impresoras, con licencias de software de tercera generación y con pólizas de garantía de un año, mediante la cooperativa de ahorro que les presta con interés módico, y después adquirirán refrigeradores, estufas y otros electrodomésticos para mejorar el nivel de vida de los policías.

Nemi Dib comentó que en los dos años de gobierno de Herrera Beltrán, el IPAX ha aumentado en 17% las percepciones de los policías y explicó que el año pasado la caja de ahorro del instituto, una asociación integrada por trabajadores, prestó 2 millones de pesos y obtuvo utilidades del 23%, 4 veces más de lo que paga un banco. Asimismo, los mismos trabajadores organizaron una cooperativa con el objetivo de comprar bienes que los policías puedan adquirir a plazos.

Añadió que estas dos instituciones no son del gobierno, sino de los propios trabajadores; están legalmente constituidas y manejan sus recursos con transparencia, a través de un consejo de administración.