La liberación de tortugas se convierte en diversión y maltrato a los animalitos

Mil 200 tortugas fueron liberadas este domingo en playa Muñecos, dos murieron en las tinas que llevaban los voluntarios y por lo menos una veintena fueron maltratadas por los niños que no sabían cómo sostenerlas o jugaban con ellas.

El alcalde de Alto Lucero, Lucio Castillo Bravo, su esposa y presidenta del DIF municipal, Leticia Rojas, la diputada local, Karime Aguilera e incluso el inspector general de la Procuraduría Federal de Protección al Medio Ambiente (Profepa) , Lamberto Herrera, por tomarse la foto se encontraban bloqueando el camino de las tortugas verdes.

Además de la muerte de dos pequeñas tortugas, por lo menos un centenar estaban dañadas de sus patas, porque estuvieron tres días en tinas de plástico, esperando ser liberadas en su hábitat, hasta el evento, el día planeado.

Aunque los niños estaban felices por poder tocar los quelonios y dejarlos sobre la arena, no lo hacían con cuidado, lo que provocaba que los voluntarios que cuidan a las tortugas se molestaran con ellos.

Las aplastaban, las aventaban y hasta las hacían pelear entre ellas, hasta que los voluntarios se daban cuenta y les ordenaban dejarlas ir.

Todo esto por la falta de organización en el evento y de personal capacitado.

En Veracruz desovan 7 de las 8 diferentes especies que hay en el mundo, pero a causa de la falta de personal, los nidos son saqueados y cuando son liberadas, mueren en los nidos artificiales o se desorientan.

Luego de que el delegado de la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), Manuel Molina Martínez, advirtiera que el proceso de la “liberación”, era incorrecto, porque las tortugas no llegan al mar con sus instintos se los dictan y mueren en el camino, el alcalde de Alto Lucero opinó que lo que hacían era ayudarlas y no dañarlas.

De cada 100 tortugas que nacen sólo 1 regresa para desovar después de 10 a 15 años, a causa de la depredación de las aves, los peces más grandes y la mano del hombre.