Madre de acusado de homicidio pide a SCJN que analice las inconsistencias en el caso

Rosalinda Quintanar, madre de Yarold L. Q., quien es acusado de matar a una joven en Valle Alto en febrero del 2012, pidió a la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) atraer el caso, pues aseguró que hay inconsistencias, ya que su hijo es inocente.

La señora, recordó que en febrero del 2012, policías de la extinta Agencia Veracruzana de Investigación (AVI) aprehendieron a su hijo, quien vivía en Matacocuite, Valle Alto en Veracruz, y lo obligaron a declararse culpable de asesinar a María Teresa G. G., de lo contrario, matarían a su esposa y dos hijos.

Mencionó que María Teresa G. G. apareció desangrentada por una puñalada, en una casa abandonada que estaba enfrente de la casa donde vivía su hijo, razón por la cual los policías asumieron que él la mató y procedieron a encarcelarlo.



Rosalinda Quintanar agregó que en 2012, un par de días después de que María Teresa G. G. apareciera muerta, elementos de la AVI fueron al domicilio de su hijo para hacerle una entrevista de rutina. A los pocos días regresaron al domicilio y se llevaron a su hijo, a quien torturaron junto con su esposa y le insistieron en que si no se declaraba culpable, matarían a su familia y luego lo asesinarían a el.

Por ello, la entrevistada pidió al a SCJN revisar el caso, pues desde el 2012 su hijo está preso en Tuxpan y fue hasta el 2016 cuando se le dictó sentencia por homicidio con una condena de 32 años de cárcel.

Mencionó que interpusieron un amparo federal, mismo que ya procedió, por lo que dijo tener confianza de que las autoridades analizarán el caso, pues hay inconsistencias, sobretodo en materia pericial.



Agregó que su hijo declaró que mató a María Gabriela G. G. asfixiándola al interior de su domicilio y posteriormente la arrastró a la casa de enfrente para que pareciera un asalto. No obstante, la difunta murió por apuñalamiento con arma punzocortante en tórax y fue hallada en un charco de sangre de dos metros de diámetro.

La madre de Yarold L. Q. mencionó que así como las pruebas periciales, hay muchas inconsistencias, por lo que dijo tener confianza de que su hijo saldrá libre; además pidió justicia para la occisa, para que su familia sepa quién la asesinó y proceda en su contra.