Mauricio Hernández presentó su libro “Miguel Bernal Jiménez. Cuarteto Virreinal”

El guitarrista Mauricio Hernández Monterrubio, acompañado del guitarrista Enrique Salmerón, presentó en la FILU 2019 su libro “Miguel Bernal Jiménez. Cuarteto Virreinal”, transcripción para guitarra editado por la Universidad Autónoma de Hidalgo.

Con salón lleno, con amigos y familiares, vaya, hasta el abuelo de Mauricio Hernández Monterrubio llegó para escucharlo, que eso fue como una reunión familiar realizada después de dos años difíciles.

Mauricio compartió con los asistentes su historia, desde que su papá siempre quiso que estudiará música, sus clases con el maestro Enrique Salmerón “mi mejor guía”, dijo.


Desde que empezó su carrera, siempre fue concertista. “Pasan los años y como me gusta la música popular, hago boleros, balada, tiempos en que la Facultad de Música se encontraba en la calle Juárez. En las escaleras de la entrada, me sentaba a toca La Bikina y los compañeros me hacían bolita. Hasta que pasaba el maestro Salmerón, quien con gesto adusto, me decía ‘Te quiero en el salón ahorita’, y eso era un regaño... aunque nunca dejé lo popular”, reconoce y sonríe.

“Después de 10 años, creo que terminé odiándolo un poco, -dice en broma- fue una gran amistad, tan cercana que antes de que se casara, hasta lo ayudé a limpiar su casa. Después que su boda lo veía, hasta que termine la carrera. Estuve 7 años en la Universidad Veracruzana mientras estudiaba mi maestría. Después solo me dieron horas para dar clases. Después de maestría sólo tenía horas, a pesar de ser el único guitarrista con maestría”.

Eso lo motivo a emigrar, por eso, al recibir la invitación de la Universidad Autónoma de Hidalgo, que le otorgó un tiempo completo aceptó y se fue. Al llegar, el requerimiento fue simple “Tienes que hacer un cuerpo académico”.

“Y ante mi desconcierto inicial, planeé hacerlo con doctores y maestros. Investigadores que planteamos como objetivo, básicamente, el rescate, la creación de obras originales y la difusión de obras musicales”.

“Hicimos varios artículos que se publicaron; sin embargo, insistimos en la publicación de partituras. Con lo que nos topamos con un desconocimiento de los encargados del área editorial que respondían ‘para qué publicar partituras, no sirve’. Tuvimos que explicarles la importancia que tienen. Imaginen si no será importante publicar las partituras de Bach, Beethoven”.



¡Hasta que se logró! Ante tanta insistencia, Mauricio Hernández Monterrubio logró que la UAEH editara libros y grabaron un disco en el que se rescatan obras de cámara con solista, de compositores mexicanos de los cuales se carecía registro.

En esta producción destaca el material musical de cámara del compositor mexicano Miguel Bernal Jiménez, del que se logró recuperar dos obras, una para piano, otra escrita originalmente para cuarteto de cuerdas, grabada en una trascripción para cuarteto de guitarras. Debido a la premura, fue el propio Mauricio quien se cuadriplicó en la grabación.

Orgulloso comparte que con este trabajo académico se rescata obras poco interpretadas, incluso desconocidas en el medio musical nacional, lo que les da un lugar privilegiado a la música mexicana de ese tipo.



La UAEH ha publicado dos piezas del maestro Hernández Monterrubio: una obra original “Preludio a dos”, escrita para dos guitarras; posteriormente La Música Acuática de Geroge Frederic Haendel, escrita originalmente para una sinfónica, trascrita para una orquesta de guitarras por el propio Mauricio, para cubrir la falta de repertorio para una gran orquesta de guitarras, la complejidad de la transcripción consiste en que está pensada para un trabajo estereofónico a 12 sección, lo que dificulta su ejecución.

Con “Miguel Bernal Jiménez. Cuarteto Virreinal”, partitura que poco se toca, poco conocida, ahora con una nueva versión para que se pueda difundir. “Todo eso, impacta en los alumnos”.

“Lo más interesante de El cuarteto virreinal es su estructura de sonata. Agarra cuatro piezas infantiles y crea una belleza de cuarteto. El primer tema es A la Víbora de la Mar; el segundo tema, Naranja Dulce, son rondas infantiles. Del tercer tema no tengo la certeza de su origen, pero el cuarto si está bien documentado” explicó.



Sobra decir que al finalizar, los abrazos y las felicitaciones del público fueron nutridas, se notó la presencia de guitarristas destacados, del nivel de Paco Aragón, Cutberto Córdova, Orvil Paz, todos, cercanos amigos del expositor Mauricio Hernández Monterrubio, feliz de ser profeta en su tierra.