Médicos y personal del IMSS piden esclarecer asesinatos frente a Plaza Américas

Las dos personas que fueron asesinadas el domingo pasado, frente a Plaza Américas no eran sicarios ni tenían ningún tipo de vínculo con el crimen organizado, aseguraron sus compañeros de trabajo, de las clínicas del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) de El Farallón y Xalapa.

Alejandro Gasas Calderón y Maribel Vázquez Cruz iban a bordo de su auto sobre la avenida Lázaro Cárdenas, cuando les dispararon unos hombres con armas largas, sin motivo alguno, dijeron los compañeros médicos de la pareja.

Fueron asesinados, Alejandro quien era médico en la clínica de El Farallón y su esposa, Maribel Vázquez, enfermera en la Clínica 11, su hijo fue herido.

La veintena de manifestantes negaron rotundamente algunas versiones en las que se afirmaba que la pareja tenía vínculos con el narcotráfico y que fue un “ajuste de cuentas”.

Ante esto caminaron desde la Clínica 11 hasta plaza Lerdo, para exigirle al Gobierno estatal y al procurador del Estado, Reynaldo Escobar Pérez digan la verdad de los hechos.

“Eran médicos que trabajaban y eso es lo único que hacían. Lo único que buscamos es que la ciudadanía se dé cuenta que murieronpersonas inocentes, y no como dicen que andaban en malos pasos”.

Los manifestantes quienes decidieron omitir sus nombres por motivos de seguridad, pidieron una investigación a fondo y resultados de este y todos los demás casos.

“No deben manchar el honor de dos personas trabajadoras”, dijeron los manifestantes, quienes con sus batas blancas y pancartas en la mano, protestaron de manera silenciosa por cerca de media hora.

Dijeron temer por su seguridad y la de la familia, ya que la persona que resultó herida en la balacera, fue el hijo de los médicos, quien no puede salir a las calles por temor alguna represalia.

“Salga lo que salga, pero que investiguen y que digan la verdad, porque han pasado muchas cosas en Xalapay quedan ocultas, como si Xalapa fuera una ciudad muy tranquila y no es cierto eso, ustedes lo saben, que lo callen es otra cosa”.

Al final, los trabajadores culparon a los medios de comunicación por omitir información acerca de los sucesos relevantes y publicar comunicados oficiales, “que no dicen la verdad”.