Un grupo de migrantes que viajaba en la caravana que salió de Tapachula, Chiapas, llegó a las instalaciones del Instituto Nacional de Migración en el puerto de Veracruz, se trata de personas que ingresaron caminando a Veracruz y que no aguantaron más y decidieron entregarse.
A cambio, el INM se comprometió a darles un permiso por un año para permanecer en el país, por lo cual, fueron trasladados desde Jesús Carranza hasta el puerto de Veracruz.
“Aquí me van a dar mi residencia, porque ya no aguanto caminar. Con la caravana me había venido. A mí me bajaron y no podía circular en bus porque ya había perdido; por eso me aventé 20 días a caminar”, comentó uno de los indocumentados.
A bordo de un autobús de ayuda humanitaria, llegaron durante la noche del miércoles, cansados de viajar caminando y por tramos en tractores.
La caravana migrante ingresó a Veracruz el pasado martes y se mantiene cruzando el territorio veracruzano con la finalidad de llegar hasta Sinaloa y cruzar a Estados Unidos.
Cabe señalar que desde su salida, la caravana se ha ido desintegrando.