Mireya Espejo Ronzón, de 51 años y 180 kilos, lleva tres meses postrada en su cama, ubicada en una vivienda humilde en la localidad de Piedras Negras en Tlalixcoyan, derivado de obesidad mórbida y otros padecimientos.
La familia de esta mujer ha solicitado ayuda a las autoridades médicas municipales y de Boca del Río, pero no han logrado solucionar su problema.
Su hermana, Anahí Espejo Ronzón, comentó que los médicos de Boca del Río diagnosticaron a Mireya con hígado graso, tiroides, diabetes e hipertensión, pero no lograron apoyarla médicamente.
"Nos dieron cita para noviembre, pero mi hermana ya casi no puede caminar. Le duele mucho el abdomen, queremos saber qué tiene porque hasta nos han dicho que su padecimiento es mental, pero queremos que nos ayuden por favor", dijo.
Postrada en su cama, Mireya se mueve de un lado a otro debido al intenso dolor de abdomen que sufre, también presenta severa hinchazón de extremidades, sobre todo de una mano, ya que le colocaron suero en el hospital boqueño y al ser diabética, la herida presenta moretones.
Por ello, esta familia tlalixcoyana clama ayuda por parte de las autoridades para encontrar solución al problema de obesidad mórbida e intenso dolor abdominal, ya que son personas de escasos recursos sin oportunidad de pagar consultas privadas para detectar la enfermedad que padece Mireya.