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Universidad Anahuac

Sección: Estado de Veracruz

No sólo hay que atacar la delincuencia organizada, también temas centrales como la pobreza: PT

Critica el comisionado estatal Arturo Pérez, estrategias emprendidas por Calderón

Irineo P?rez Melo Xalapa, Ver. 26/06/2011

alcalorpolitico.com

La dirigencia estatal del Partido del Trabajo (PT) criticó las estrategias emprendidas por el gobierno de Felipe Calderón para combatir la delincuencia organizada, la cual, junto con la pobreza, son fenómenos multidimensionales y que la primera es consecuencia de la segunda, por lo tanto el atacarlo requiere atacar aspectos centrales desatendidos hasta hoy, convirtiéndose en una deuda con la sociedad que es urgente saldar.

En conferencia de prensa, Arturo Pérez Pérez, comisionado político nacional del PT en el estado, reprochó la actuación del Mandatario Federal en la reunión sostenida con activistas encabezados por el poeta Javier Sicilia, en la que pide perdón por los resultados obtenidos por su gobierno en la lucha contra el narcotráfico.

El líder estatal petista comentó que el perdón de Calderón es un perdón con algunos olvidos. ¿De qué pide perdón Calderón? ¿Para qué pide perdón si aún reconociendo sus errores está empecinado en continuar con esta lucha sin sentido, vaticinada al fracaso y con pérdida de vidas inocentes? Se preguntó.

Pérez Pérez consideró que la estrategia utilizada en el combate al crimen organizado, al igual que la política económica impuesta a los mexicanos tiene altos costos para la sociedad o ¿Acaso los miles de muertos por tifoidea, dengue, cólera, tétanos, pulmonía, paludismo, infecciones gastrointestinales, muertos por ser pobres, no merecen que se les ofrezca el perdón también a sus familiares por no haber cumplido con la responsabilidad que todo Estado tiene de garantizar las condiciones para el pleno desarrollo de la sociedad? O ¿Es acaso que éstos últimos son responsables de sus propias muertes? Insinuó.

En ese sentido, hizo mención de las cifras dadas por el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (CONEVAL) en donde se considera que a pesar de los avances y logros de los programas sociales han permitido ampliar los servicios de salud, de educación, de alimentación y de vivienda, particularmente entre quienes más lo necesitan, sin embargo, la pobreza por ingresos sigue siendo elevada en México y aumentó debido al entorno económico adverso a nivel internacional y nacional.

De acuerdo con la medición oficial de la pobreza, elaborada por el CONEVAL, en el año 2008, 44.2 por ciento de la población nacional vivía en condiciones de pobreza, es decir, aproximadamente 47.2 millones de personas en el país presentaban al menos una carencia social y no tenían un ingreso suficiente para satisfacer sus necesidades. Esta población presentó en promedio 2.7 carencias sociales.

Del total de la población en pobreza, 36 millones de personas (33.7 por ciento de la población) estaban en pobreza moderada y tenían en promedio 2.3 carencias; 11.2 millones de personas (10.5 por ciento de la población) experimentaba pobreza extrema y sufrían 3.9 carencias en promedio. Se considera pobreza extrema a la población que presenta tres o más carencias sociales y su ingreso es insuficiente para cubrir sus necesidades de alimentación, aun si dedicaran todo su ingreso para ese fin.

Asimismo, 19.5 millones eran pobres alimentarios, es decir, quienes tienen ingresos insuficientes para adquirir una canasta básica de alimentos, incluso si los destinaran exclusivamente para ese fin. De los pobres alimentarios en 2008, 7.2 millones habitaban en zonas urbanas (localidades de 15,000 o más habitantes), mientras que 12.2 millones residían en el área rural.

Entre 2006 y 2008 aumentó la incidencia de la pobreza de patrimonio —el porcentaje de personas pobres—, la cual pasó de 42.6% a 47.4%; a su vez, la incidencia de la pobreza alimentaria aumentó de 13.8% a 18.2%. En términos absolutos, el incremento fue de 5.9 y 5.1 millones de personas, al pasar de 44.7 a 50.6 millones de personas y de 14.4 a 19.5 millones de personas, respectivamente.

“El incremento en la incidencia y el número de personas pobres deberá ser un elemento de particular atención en la evaluación de las políticas públicas de desarrollo social de los tres órdenes de gobierno”, puntualizó y confió que al final de su sexenio Felipe Calderón con estos resultados, no nos vaya a decir que “haiga sido como haiga sido, no claudiqué en mi lucha contra el narco, el crimen organizado y el combate a la pobreza”, concluyó