En la guerra nadie gana: Obispo de Orizaba

El obispo de Orizaba, Eduardo Cervantes Merino, lamentó que la inseguridad en el país no cese y que ahora se sume, lo que llamó, una situación muy penosa y de fragilidad en la paz mundial, la cual lastima, pues en todo tipo de guerra nadie gana.

Añadió que, durante la Eucaristía de este domingo en la Catedral San Miguel Arcángel, los fieles se unieron para pedir por la paz, que se ve cada vez más debilitada a nivel global. “Podemos pensar que los líos que están pasando en Medio Oriente es cosa de ellos y no, es de todos porque tristemente estamos en una situación muy penosa y de fragilidad en la paz que nos lastima. En la guerra nadie gana, todos perdemos, por eso vamos a pedir a Dios, unidos a la Iglesia en México, por la paz”, dijo.

Expresó que no sólo hoy, sino siempre, se debe rogar por ese don, para que todos logren ponerse de acuerdo, pues, señaló, todo empezó de manera local y ahora “se están metiendo los grandotes y ya ven que eso se complica demasiado. Ahora acá en México debemos procurar la paz entre nosotros. Y es que esta violencia no acaba en nuestro México, en la carretera, en la inseguridad y más”, dijo.



Comentó que todos debemos reflexionar sobre esos momentos trágicos de pequeñas guerras que existen y, en este momento, sobre la gran guerra que se está gestando. “Que Dios nos libre de algo más grande, pero también de las pequeñas guerras que a veces tenemos en familia, en los grupos de trabajo, con los vecinos, a veces guerritas de inseguridad en los barrios y comunidades. Por eso pidamos a Dios por la paz, especialmente por esta violencia mundial”, dijo.