El obispo de la Diócesis de Coatzacoalcos, Rutilo Muñoz Zamora, pidió perdón a las madres migrantes por los connacionales que han hecho daños a los viajeros centroamericanos en su paso por México.
Asimismo, lamentó que haya autoridades mexicanas inmiscuidas con la delincuencia organizada y a pesar de ello, pidió a las mujeres también perdonar de corazón con la firme determinación de seguir con su búsqueda.
Durante una misa celebrada en honor a la caravana, recalcó que los migrantes son víctimas de la delincuencia en México y de la injusticia, muchas veces de personas que se dicen católicas y que supuestamente son creyentes.
“La Navidad deberá tener un sentido fuerte para todos nosotros, para quienes tienen familiares desaparecidos y les falta algo más para tener alegría, pero también como dice el evangelio: 'si creemos en el Señor, él puede hacer que las cosas más sencillas se hagan grandes'”, sostuvo.
Reiteró: “Nos duele que en México no estemos a la altura de una respuesta dentro de la justicia y de la solidaridad. Algunos de ellos han quedado por situaciones de violencia e injusticia en nuestro territorio y esperamos que los puedan encontrar; ha pasado que algunas personas de la delincuencia organizada se dicen creyentes y católicos. Los invitamos a ellos para tener fuerza y que tengan los medios necesarios para su búsqueda”.