El obispo de Orizaba, Eduardo Cervantes Merino, dijo que a la iglesia le preocupa que todos los mexicanos puedan tener un acceso digno a la salud, sobre todo a las vacunas.
"Otras de las preocupaciones es el dolor y la tristeza que viene desencadenada del coronavirus, el desempleo y todas las situaciones dolorosas que nos aquejan, pero quiero decirles que en todo esto tenemos esperanza que nos da Cristo Jesús", dijo.
Y es que a propósito de que este año termina, dijo que se concluirá con la esperanza de que se puede hacer un mundo mejor: "pues de una crisis no se sale igual, sino mejores o peores y cada uno define como quiere salir de esta".
En el ámbito espiritual, mencionó que la preocupación de la iglesia es que la gente se olvide de que son hijos de Dios, por ello se debe anunciar que el Todopoderoso viene para dar sentido a la vida.
"Tenemos que salir adelante formándonos en los valores del evangelio viviendo la solidaridad, la comunión, nuestra iglesia católica está actitud de sínodo, de caminar juntos, escucharnos, discernir lo que el Espíritu Santo habla a través de las necesidades y de las situaciones diferentes que se viven y lo que expresamos", finalizó.