Para salir adelante, madres solteras no necesitan de ningún hombre: Ana Lidia Hernández

"Cuando la sociedad ve una mujer que es madre soltera enseguida la critican o hacen expresiones de 'pobrecita', ¿no sé por qué? si ya hemos demostrado que para salir adelante no se necesita a ningún hombre", aseguró Ana Lidia Hernández, quien se dedica a limpiar casas.

A sus 43 años y con tres hijos, Ana se dedica a limpiar casas particulares desde hace 20 años, actividad que inició desde que estaba casada porque el dinero que en aquel entonces su exesposo llevaba a la casa no alcanzaba porque "era alcohólico".

"Mis dos primeros hijos sufrieron más porque ellos tuvieron carencias de todo, mi esposo trabajaba pero todo se lo tomaba y lo que le sobraba pues ya lo llevaba a la casa, eso era siempre motivo de peleas porque no le importaba si sus hijos comían o no, le importaba su vicio".



Al ver que quien debía llevar el sustento de la familia no lo hacía decidió ponerse a trabajar, pero como no tenía estudios, salió a la calle a tocar de puerta en puerta a ver quién le daba trabajo limpiando casa.

"No tardé mucho en encontrar trabajo y la verdad aunque es un trabajo cansado se gana bien y con eso he podido mantener a mis tres hijos".

Hace diez años se separó, sólo tenía a dos de sus pequeños y uno más venía en camino; sin embargo, la situación de carencias, alcoholismo de su pareja e incluso maltrato, la hizo tomar una decisión determinante, convertirse en madre soltera y hacerse cargo ella sola de sus tres hijos.



"Con lo que yo ganaba prácticamente comíamos y vivíamos en la casa y mi esposo dejó de aportar y se dedicó a su vicio. Al principio más que triste estaba feliz, me sentía liberada pero a la vez preocupada porque no sabía si iba a poder cuidar sola a tres pequeños, pero como mi hijo más grande tenía ya 12 años me apoyé en él, y el cuidaba a sus hermanos mientras yo trabajaba".

Sin embargo, aseguró que no contó con el apoyo de su familia quien veía mal que dejara a su marido para estar ella sola con sus tres hijos, le decían que su "obligación" era quedarse con él pues era el hombre que ella había escogido de pareja para toda la vida.

"Me decía mi familia que esa era mi cruz, pero yo no pensaba así, no quería cargar con esa cruz y primero me criticaron muy feo, ya después me decían pobrecita estás sola con tres niños y desconfiaban en que pudiera sacar adelante a mi familia, pero pude, no necesité a un hombre borracho a mi lado".



Ana Lidia lamenta que México sea una sociedad machista que piensa que una mujer sola no es capaz de sacar adelante a su familia, pero una y otra vez las mujeres han demostrado que ellas son "las mujeres que llevan los pantalones de la casa".

"Yo soy papá y mamá para mis hijos, yo llevo los pantalones de la casa".