PEMEX no paga a compañías contratistas en sur de Veracruz; adeuda mil 800 mdp

Trabajadores de compañías contratistas decidieron salir a las calles este miércoles para alzar la voz y denunciar la falta de pago por parte de Petróleos Mexicanos (PEMEX), que mantiene una deuda de más de mil 800 millones de pesos con al menos 25 empresas que brindan servicios en instalaciones estratégicas del sur de Veracruz.

La protesta se llevó a cabo a las afueras de la refinería “Lázaro Cárdenas”, donde decenas de empleados –muchos de ellos padres de familia– exigieron a PEMEX el cumplimiento de los compromisos económicos que, aseguran, han puesto en jaque la estabilidad de más de 700 hogares en la región. La deuda afecta directamente la operación de compañías que trabajan también en los complejos petroquímicos de Cosoleacaque y Cangrejera.

“Hoy no estamos en casa celebrando con nuestros hijos; estamos aquí, en la calle, luchando por el sustento de nuestras familias”, expresaron los manifestantes, quienes advirtieron que si la situación no se resuelve pronto, podrían perder su fuente de ingresos en el mes de mayo.

Durante la protesta, los trabajadores apuntaron directamente al gerente de la refinería, Carlos Gutiérrez Jacinto, a quien responsabilizan por la falta de gestión para agilizar los pagos. “Es omiso y no ha presionado a la Dirección General para resolver esta crisis”, señalaron.

Aseguran que PEMEX ha optado por el silencio: no responde correos, ni llamadas, y tampoco ha ofrecido alguna fecha de solución. Esta actitud, afirmaron, pone en riesgo la viabilidad de pequeñas y medianas empresas locales dedicadas a tareas esenciales como mantenimiento, operación y logística en el sector energético.

Además de criticar la inacción de la empresa estatal, también lanzaron un reclamo directo al Gobierno Federal, acusándolo de abandonar a los trabajadores del sur del País y de incumplir con los ideales de justicia y bienestar que pregona la llamada Cuarta Transformación. De no haber avances en los próximos días, advirtieron, las protestas podrían escalar con nuevas movilizaciones en otros puntos estratégicos de la región petrolera.