Piden liberar en Nanchital a mona aulladora rescatada por autoridades

Molly, una mona aulladora de aproximadamente tres años, podría recuperar su libertad en el lugar donde nació: el ejido Lázaro Cárdenas, en el municipio de Nanchital.

Así lo propuso el médico veterinario Jaime Takami, quien fue el encargado de evaluar su estado de salud tras su rescate de condiciones de cautiverio el pasado 29 de abril.

De acuerdo con Takami, la mona fue localizada con signos evidentes de malnutrición, parásitos intestinales y una dieta deficiente en hojas, elemento esencial para mantener las bacterias benéficas que equilibran su sistema digestivo. “Estos animales necesitan consumir más de 150 tipos de hojas al año para conservar su microbiota. Sin ellas, las bacterias buenas se transforman en patógenas y pueden provocar la muerte por enteritis”, explicó.



El veterinario señaló que Molly no debe ser enviada a otro sitio, como ha ocurrido con otros ejemplares en el sur de Veracruz. Enfatizó que su supervivencia depende de su reintegración a un ecosistema que conozca, donde existan tropas de su misma especie y condiciones ambientales que favorezcan su adaptación. “Liberarla en otra parte sería un error. En el ejido hay registros de otros monos que han sido reintroducidos con éxito. Ella tiene posibilidades reales de reintegrarse”, subrayó.

La mona fue rescatada por personal del Departamento de Ecología de Nanchital, que dio parte a la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (PROFEPA), la cual debe ahora decidir el destino del ejemplar. Sin embargo, Takami insistió en que el criterio médico y ecológico debe prevalecer sobre otros factores, ya que su traslado a un entorno diferente podría poner en riesgo su vida.