A decir de Jorge Moch Zamora, escritor y periodista, existe un "maridaje" entre gobierno y medios de comunicación, de tal forma que existe un control de lo que se publica y cero libertad de expresión.
Aseguró que muchos de los estados de la República atraviesan por esa situación a excepción de los medios nacionales y, Veracruz se ubica entre los peores lugares en ese aspecto.
“Un maridaje indebido entre poder y medios, hay una serie de factores que obligan a los medios a obedecer una serie de reglas no escritas que no son deseables para la sociedad; sin embargo, son uso y costumbre muy arraigado en el sistema de los medios en México. En los medios nacionales en los que algunos colaboramos esto es menos evidente, pero en los medios estatales suele ser una cosa evidente".
Esto se debe a que existe una dependencia total económica por parte de los medios hacia el Gobierno del Estado, pues se convierte en ocasiones en su único cliente.
"El medio estatal en Veracruz ha seguido otra vertiente que encuentro muy criticable, porque termina siendo propagandista del poder y la posición de los medios no es hacerle el favor al funcionario sino redimensionarlo".
Moch Zamora, quien colabora en diferentes medios de comunicación en el mundo y en México, con su columna "Cabezalcubo" en el periódico
La Jornada, aseguró que el medio donde trabaja -
La Jornada- es de los pocos que no son corruptibles.
“Dependen económicamente de una manera absurda de los presupuestos oficiales y eso es muy dañino para la información, para el periodismo (…) a muchos medios les conviene mucho obtener dinero del presupuesto público porque si no estarían prácticamente muriéndose de hambre”.
En entrevista, previo a la presentación del libro “Medio y opinión pública en Veracruz”, en la USBI de Xalapa donde asistió como invitada especial la rectora de la Universidad Veracruzana, Sara Ladrón de Guevara; Moch Zamora comentó que esta pieza es una serie de ocho ensayos que observa el trabajo de los medios de comunicación y el comportamiento de los mismos durante los procesos electorales en el Estado.
“Y también contiene algunas observaciones muy agudas y críticas sobre el estado de los medios en el Estado, el cual tiene un problema muy grave y el estado de Veracruz particularmente incide en este problema del maridaje”.
Dijo que hay medios que son excepciones en ese tema y ejemplificó con
La Jornada la cual no es acrítica; sin embargo, en el resto de los medios de comunicación -específicamente en Veracruz- resaltó que existe un problema serio de medios “acríticos y laboracionistas”.
Lamentó que han convertido el periodismo en negocio y esa ha sido la gran tragedia en México.
“Se trata de operaciones mercantiles, no periodísticas, salvo un caso que sería y lo digo con mucho orgullo,
La Jornada, que es uno de los diarios que tengo el privilegio de colaborar, la mayoría son sociedades mercantiles o empresas privadas”.