Rechaza FGE recomendación de CEDH sobre víctimas de ataque a bar “Caballo Blanco”

La Fiscalía General del Estado, encabezada por Verónica Hernández Giadáns, no aceptó la recomendación emitida por la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH) que determinó la existencia de actos constitutivos de trato indigno hacia los cuerpos de 24 víctimas del ataque al bar “Caballo Blanco” en Coatzacoalcos, ocurrido en 2019.

En la Recomendación 30/2025, la CEDH documentó que personal del Servicio Médico Forense, adscrito a la Fiscalía, incurrió también en hechos de revictimización contra familiares de las víctimas durante el proceso de identificación y entrega de los cadáveres.

Según el expediente CEDHV/1VG/COA/0480/2019, familiares denunciaron que los cuerpos fueron entregados “sucios”, “desnudos”, en estado de descomposición” y hasta “en bolsas de basura”. Además, acusaron dilación en la entrega de información, tratos inadecuados y condiciones indignas en las instalaciones del Servicio Médico Forense en Cosoleacaque.



Relatos

“(…) me percaté del uso inhumano que utilizan estos servidores públicos, ya que tenían varios cuerpos tirados en la tierra y expuestos al vivo sol, completamente desnudos y sucios”. Más tarde, al revisar el cuerpo en su casa, observó que “estaba completamente sucia, llena de tierra, raspada de las piernas, presentando hematomas”, relató una de las víctimas indirectas, identificada como V1

Otra persona, V2, detalló que al llegar al SEMEFO a las 11 de la noche, “me percaté que había varios cuerpos tirados en el piso, sin los mantenimientos adecuados, encimados unos a otros, entregándome el cuerpo de [VM2) a las 2 de la mañana del día jueves 29 de agosto, en ese momento me di cuenta de que estaba en estado de descomposición más avanzada”.



“(…) “ella tenía muchos golpes y el ojo izquierdo lo tenía de fuera y ya presentaba fétido olor”, dijo V3. Por su parte, V4 señaló que “tenían a [VM4) en condiciones inhumanas, tirada en el piso bajo el sol. Al entregárnosla en el ataúd toda sucia y sin preparar”.

V5 declaró: “Me percaté que uno de los cuerpos que se encontraba completamente desnudo y sucio en el interior de una bolsa de nylon color negro era [VM5)”, y al recibirlo en una funeraria “nos percatamos que el cuerpo se encontraba hinchado y además empezó a soltar un olor fétido”.

V6 relató que el cuerpo de su familiar “se encontraba completamente desnudo y sucio, en donde le llegaba directamente los rayos del sol, en ese mismo lugar se encontraban varios cuerpos desnudos y sucios uno sobre otro”.



En el testimonio de V7 se expuso: “me quedé asombrada al ver la forma en que se encontraban los cuerpos, esto es, los cuerpos se encontraban desnudos y uno sobre otro. Me entregaron el cuerpo de [VM7) completamente desfigurado y en estado de descomposición dentro de una bolsa de nylon color negra de las que se utiliza para tirar la basura”.

V8 afirmó que “pude ver la forma en que tenían acumulados los cuerpos desnudos uno sobre otro, sin el mínimo respeto a los cadáveres y sin refrigerar”.

V9, quien permaneció desde las 7 de la mañana hasta las 6 de la tarde en la Fiscalía, expuso que “vimos los cuerpos desnudos sobre el piso uno sobre otro, y además sin refrigeración; fue hasta esa fecha que me entregaron el cuerpo de [VM9) para darle sepultura, pero el cuerpo ya soltaba un mal olor y líquido durante el funeral, por lo que no fue posible velarlo muchas horas”.



V10 relató que “encontrando varios cuerpos desnudos, llenos de tierra y sin refrigeración, cuando por fin recibí el cuerpo de [VM10), este se encontraba con un ojo explotado y ya olía mal por lo que tuvieron que embalsamarlo 2 veces para retirar un poco del mal olor”.

V11 denunció que la servidora pública del SEMEFO “pretendía entregarle el cuerpo de [VM11) a la funeraria sin un reconocimiento previo para tener la certeza que se trataba de [VM11) pues sólo pretendía hacerlo por medio de fotografía” y que “el cuerpo ya soltaba un mal olor a causa de la falta de refrigeración desde el día de los hechos hasta la fecha en que me lo entregaron”.

Trato indigno



La CEDH acreditó que “los cuerpos de por lo menos 22 víctimas fueron tratados sin respeto a su dignidad, sin cuidado y sin medidas mínimas para su preservación”. Además, consideró que la Fiscalía “vulneró los derechos de las personas fallecidas (…) durante el proceso de levantamiento, identificación y entrega de sus cuerpos”.

La institución reconoció el daño moral ocasionado a los familiares y estableció que “el cuerpo de (VM13) ya se empezaba a descomponer”, y que fue entregado en tal estado que “la funeraria tuvo incluso que desechar partes del cuerpo de (VM13)”.

Atentado



La Recomendación 30/2025 incluye medidas de reparación integral, como atención psicológica, compensación económica proporcional al daño, una disculpa pública y capacitación al personal de la Fiscalía. También exige reforzar los protocolos para evitar futuras vulneraciones.

“La presente Recomendación constituye por sí misma una forma de reparación”, concluyó la Comisión Estatal de Derechos Humanos.

Cabe recordar que el atentado ocurrió el 27 de agosto de 2019, cuando sujetos armados irrumpieron en el bar, rociaron gasolina, arrojaron explosivos e impidieron la salida de empleados y clientes. Por los hechos se reportó la muerte de al menos 34 personas. La mayoría de los cuerpos fueron trasladados a Cosoleacaque, donde comenzó una serie de omisiones, según el organismo.