Rechazan que Reforma Laboral quite derechos a trabajadores del país

La Reforma Laboral aprobada en octubre por el Senado de la República, que tendrá que discutirse y aprobarse en la Cámara de Diputados, no atenta contra la autonomía de las organizaciones ni afectarán los derechos de los trabajadores, como es el caso de la huelga

Esto lo aseguró el delegado federal del Trabajo y Previsión Social en el Estado, Dionisio Pérez Jácome, quien confió en que no se radicalizarán los aspectos laborales con la judicialización de este sector y rechazó la postura asumida por algunas centrales obreras que la reforma laboral atente contra su autonomía.

Y es que dicha reforma transfiere la impartición de justicia laboral a los tribunales laborales del Poder Judicial de la Federación o de las entidades federativas en el ámbito local y federal, en sustitución de las Juntas de Conciliación y Arbitraje.



Pérez Jácome sostuvo que las organizaciones laborales conservarán sus derechos y tendrán su representación jurídica como ahora la tienen.

“Yo creo que no es ese el temor, el temor es que los mismos jueces, en el momento mismo que se sustituyan los presidentes y los representantes de las Juntas de Conciliación sepan hacer sus tareas, sí vendrán de universidades, vendrán con conocimientos amplios adquiridos que podrán leer otros que les ilustren, pero les faltará experiencia, que es un tesoro que los viejitos tenemos que proclamar, porque es lo que sustenta nuestros deseos de seguir sirviendo a la sociedad”, dijo.

—¿El Poder Judicial está preparado para asumir esta responsabilidad? —Se le cuestionó.



—Yo creo que sí, mira tiene en muchos campos méritos internacionales, porque no en el laboral. Si fuera mañana yo te diría que sería una barbaridad, pero si va a ser dentro de un año o año y medio en lo que transita la reforma en todo lo que corresponde a los procesos legislativos, a las discusiones públicas, a la reglamentación secundaria, va a salir adelante.

Al insistírsele sobre lo relacionado al derecho a la huelga, sostuvo que no tiene porque verse afectado este derecho inalienable que tiene el trabajador.

“No se va a suprimir, va a existir y cuando sea menester, ojalá los menos posibles para no perjudicar el avance económico del país, tendrá que ejercerse”, dijo.



De la nueva etapa que se tendrá con la aplicación de la reforma laboral, admitió que será trascendente y difícil, de la cual se necesita que los trabajadores estén muy pendientes.

“Se está trabajando bien, creo que los sectores, las propias organizaciones laborales y el Gobierno, pero transformar la justicia que tantos años ha operado bajo esta fórmula tripartita, bajo la conciliación y el arbitraje por una justicia ordinaria, puede ser que sea una avance, parece que así se ha convenido, pero se necesita que todos le pongan ganas para que no vaya a ser al contrario que vaya a ser una marcha hacia atrás”, finalizó.