Los maestros de Veracruz se sienten presionados y agredidos por las reformas a la ley de educación y las leyes secundarias, pues a decir de José Luis Martínez León, profesor de educación primaria, los quieren obligar a perder sus derechos laborales.
“Nos están presionando, nos están tratando como si no quisiéramos hacer las cosas, y eso es falso, completamente falso, y la otra gran falsedad es que lo que están haciendo es una reforma educativa, no es cierto, es una reforma laboral”.
Aseguró que la reforma no contempla la elaboración de nuevos libros, nuevos planes de estudios, ni programas que tengan que ver con el área pedagógica.
“Es una reforma laboral eso lo insistimos, toda la reforma educativa tiene que ver con ámbitos laborales, básicamente afecciones laborales, entonces hablemos claro”.
Señaló que es un profesor que tiene 30 años de servicio, por lo cual entiende que la educación no es únicamente una responsabilidad magisterial, sino que la educación tiene una serie de componentes alrededor que tienen que ser evaluados y calificados.
“Jamás en mi vida me había sentido tan agredido, porque los medios y el gobierno me señalan como el único responsable de la falla educativa, soy un maestro que trabaja de 8 a 12 y media aparentemente pero por la tarde elaboro trabajos educativos y reviso trabajos de mis alumnos, los fines de semana elaboro evaluaciones, busco información, soy un maestro que atiende, cuarto, quinto y sexto en mi escuela, es un trabajo enorme que nadie reconoce”.
Indicó que el sistema del poder en este país, los quiere orillar a una indefensión laboral, en donde pareciera que todo lo que pasa alrededor de la educación es responsabilidad de los maestros, cuando en realidad está involucrada el mismo gobierno y la sociedad.
“Que el estado y la sociedad también retribuyan, que el Estado y la sociedad reconozcan su participación y su responsabilidad en el acto educativo, porque nuestras escuelas están desprotegidas, nuestras escuelas no reciben los recursos adecuados ni en tiempo, ni en forma”.
Criticó la puesta en marcha de las escuelas de tiempo completo, pues aseguran que únicamente les dieron carga laboral a los maestros, pero no les dieron las herramientas para poder impartir más clases y nuevos métodos educativos.
“Está mal enfocado, una escuela de tiempo completo debe de dar a los alumnos materiales suficientes, especialistas en determinadas áreas como educación física y artísticas, le están llamando escuela de tiempo completo a una escuela de tiempo extendido, a mi maestro me dicen trabajas 4 horas más pero con qué materiales, con que voy a trabajar, quieren que lleve actividades de lengua extranjera pero con que, me das un programa, me ofreces un curso, que me ofreces como gobierno para que yo haga mi trabajo”.
Mencionó que la educación en México no va a mejorar si los maestros no están de acuerdo con el gobierno, si no trabajan codo a codo.