Sí se están viviendo problemas tras la reforma laboral que surtió efecto el primero de mayo en el 2019, indicó dirigente regional de la Confederación Revolucionaria de Obreros y Campesinos (CROC), César Silva Reyes, quien apuntó que algunas nuevas propuestas que podrían aprobar los diputados, traerían afectaciones.
"Desaparecieron las juntas de conciliación y arbitraje y se crea un Centro Federal de Conciliación; muchos sindicatos no han podido regularizar sus documentos, otros incluso carecen de toma de nota; de algunos sindicatos podrían desaparecer principalmente aquellos blancos que no estuvieron dentro de la legalidad".
Añadió que a este panorama le sumamos las reformas que se pretenden para disminuir la jornada laboral, todo hace que se observe un tanto complicado el ambiente, en cuanto a que los costos para los patrones, el mantenimiento y conservación de las fuentes de empleo y poder manejar su stock de ventas les va a generar un problema.
"Porque prácticamente deberán generar un turno más de trabajo. Lo veo genial para que los trabajadores descansen dos días a la semana, pero lo veo complicado en cuanto al sostenimiento de las plantas productivas".
Aunque apuntó que el salario no se va a tocar, pero sí tendrían que preocupar ahora en la revisión de los contratos colectivos, que no supere el salario mínimo, porque ningún patrón va a estar dando el 20 por ciento que el Gobierno Federal va a volver a decretar para un año electoral que es el 2024.