Las imágenes de las dos pantallas gigantes impuestas en el World Trade Center de Veracruz bailoteaban, buscando la ubicación del senador de la República, Héctor Yunes Landa. Por los altavoces, el gobernador Javier Duarte de Ochoa lo felicitaba por su cumpleaños y anunciaba un presente para la significativa celebración.
Por fin, las cámaras captaron al Legislador que ya iba en camino a recibir la caña de pescar que el Mandatario lo obsequiaba. Iba a paso apresurado, con una sonrisa y entre aplausos de los más de 15 mil integrantes de la CNC, congregados ahí para atestiguar el cambio de la dirigencia de esa organización campesina.
Las dos pantallas mostraban a Héctor Yunes feliz, arropado por los presentes y de fondo las palabras de Duarte: “hoy, es el cumpleaños del senador Héctor Yunes y he escuchado y he leído en algunos medios de comunicación su afición por la pesca, así que me permito regalarle al senador Héctor Yunes esta caña de pescar para que pesque esos peces gordos que busca”.
De inmediato, la tónica del discurso del Gobernador cambió de tono provocando que la sonrisa del Senador se desdibujara. Entre más pasaban los segundos, parecía que el aspirante a la gubernatura se tambaleaba en el templete, aminoró el paso, tardó una eternidad en llegar a recibir su regalo.
“Le recomiendo, aquí, muy cerquita de aquí, en el Estero, hay unos peces gordos también muy importantes que puede pescar con esta caña”, en clara referencia a la familia del diputado federal Miguel Ángel Yunes Linares.
Ante los miles de cenecistas, el Mandatario pidió a Héctor Yunes medir con la misma vara que mide a sus correligionarios a todos los de enfrente, aunque sean sus familiares.
“Que son peores todavía y que sin importar que sean familiares también estén presentes de las corrupciones evidentes que existen de aquel lado”, asentó con gesto de enojo y manoteando el Ejecutivo Estatal, ante un Senador pasmado, con una sonrisa obligada, colorado e inerte ante todos los invitados que no disimulaban sus risas y sus burlas, algunos al grado de las carcajadas.