Regidora de Cerro Azul, reprimida también por ser mujer y de la 3ª edad

Por ser víctima de hostigamiento y represión por el presidente municipal de Cerro Azul Reynaldo Mora Núñez, la regidora quinta de extracción panista Francisca Loya Vera denuncia al alcalde, quien le ha cancelado desde las compensaciones hasta el mobiliario de la oficina.

La regidora quien actualmente cuenta con 68 años de edad se define como una luchadora social de muchos años, que ha ganado el respeto de la población por el trabajo realizado, asegura que el munícipe lo que busca es presionarla tanto a fin de que renuncie al cargo.

Indicó que tiene las comisiones de agua potable, alcantarillado, ecología, medio ambiente, participación ciudadana y vecinal, las mismas que no puede desempeñar porque carece de un vehículo para poder trasladarse a cumplir con sus labores, asimismo le fue retirado el personal de apoyo que la auxilie en sus labores.

“Me han quitado no solo a los trabajadores que me ayudaban, sino también me han dejado sin muebles, lo peor es que la pequeña oficina que me dieron no es segura, porque cualquier mañana llegó y me doy cuenta de que revisaron todo, así es que no hay privacidad”.

Lamentó que las compensaciones a las cuales tiene derecho se le hayan suspendido, el salario lo han reducido a la mitad, contrario al resto de los regidores a quienes se les paga el 100 por ciento del salario y compensaciones, además de que tienen equipo de cómputo, en cambio ella no tiene más que un escritorio y una silla.

Indicó que ha hecho del conocimiento de esta situación a las autoridades estatales para poner fin al hostigamiento de parte del alcalde, ya que desafortunadamente se vale de algunos medios de comunicación para difamarla tanto a ella como a su asistente.

Asimismo dijo que no se le considera cuando hay reuniones de cabildo, por el contrario el resto de los ediles son citados a ella únicamente se le requiere cuando hay que firmar las actas.

Por esta razón ha solicitado el apoyo de la dirigencia estatal de su partido y de la Comisión Estatal de Derechos Humanos, porque no es válido que por el único hecho de ser mujer y tener más de 60 años se le haga a un lado y pretendan cometer con ella arbitrariedades.