Los retrasos que se tienen en los expedientes del Juzgado Sexto de lo Familiar en Orizaba, en gran medida se deben a que se está trabajando con menos personal, así como que algunos trabajadores están bajo resguardo por ser sectores de riesgo ante la pandemia del COVID-19, explicó la jueza Miriam Rendón José.
“Hay personal que trabaja bajo protocolo de salud y otras compañeras que están trabajando a distancia y no pueden asistir. Lo malo es que no es virus que se quite en una semana y ya, algunos tenemos el sistema inmune y no se sabe que lo tienes hasta que te da. En este juzgado ha salido positivo un compañero, el año pasado y ahorita tenemos a dos (de ser sospechosos)”.
Esta situación sin duda, dijo, afecta en gran medida la operación del Juzgado y también a eso se deben las quejas de los abogados con respecto a la tardanza de las sentencias, acuerdos y audiencias.
En este momento están trabajando cuatro oficiales secretarios, la encargada del archivo y ella que es la titular del Juzgado.
Apuntó que el Consejo de la Judicatura Federal ha instruido aplicar los protocolos y por cuestión de salud, es necesario limitar al personal y eso hace que sea más lento el tema de los trámites judiciales.
“Estamos conscientes de que hay términos y estamos tratando de cumplirlos pero es inevitable que se acumulen las promociones o cuestiones que ellos estaban acostumbrados y nosotros estamos haciendo más diligentes y más eficaces”.
Indicó que por situaciones relacionadas a este tema de salud, es imposible agendar más de 3 audiencias en un día, pues se tiene que buscar que no haya aglomeraciones, de lo contrario no se estaría respetando el protocolo de salud.
"Los abogados se ven limitados y les ofrezco a todos, disculpas si se han sentido dolidos pero no es nuestra intención. De hecho, los jueces, los oficiales y demás estamos para servirles más allá del horario que establece la ley”.
Y ante las quejas expuestas por los abogados y que los mantiene molestos, apuntó que pondrá más empeño y saldrá a las salas de audiencia.
"Por ahí un abogado dijo que no me ha visto. Qué lástima por él pero no puedo estar todo el día en las salas, si no a qué hora atiendo y a qué hora resuelvo”.