Un taxi de Coatzacoalcos circula con una hoja de acrílico que protege al conductor del contagio de Coronavirus.
Se trata de la unidad 1792, cuyo conductor adecuó el vehículo para no tener un contacto directo con el pasajero, sólo cuando tiene que cobrar la corrida.
El acrílico está colocado detrás del asiento del chofer y el copiloto, además de limitar la comunicación verbal y auditiva entre el conductor y el usuario pero está no es nula.
Este tipo de medidas se suman al uso de cubrebocas, gel antibacterial y líquido desinfectante que ya aplican algunos ruleteros del puerto.
Rodolfo Ortiz Pacheco, conductor de la unidad, dio a conocer que gastó cerca de mil 500 pesos en la colocación de esta protección, además tardó 6 horas en ello pero insistió que es un monto que le está salvando la vida.
"Si nos enfermamos tendríamos que gastar en ir al médico, medicinas, más el tiempo que dejaría de trabajar. Por eso es mejor poner esto para salvaguardarnos", dijo.
Ante la situación, hizo un llamado a sus colegas para seguir el ejemplo y así protegerse e incluso proteger a los usuarios.