Salvemos el Himno de Veracruz

Varios comentarios de analistas y columnistas han revelado la intención del gobierno morenista de Cuitláhuac García de desaparecer el Himno de Veracruz, con el razonamiento de que fue resultado de un concurso público convocado por el gobernador Fidel Herrera Beltrán, y éste fue un mandatario corrupto.

Hay varios argumentos que son base para decir que esa intención de borrar el himno, es otra política pública errónea del novel gobernante García Jiménez y de su equipo, ciertamente poco experimentado en el arte de la administración pública.

Vamos a dar una vuelta por ellos.



1. Eso de que el himno estatal resultó de una convocatoria pública hecha por un gobernador corrupto pierde todo sustento si nos atenemos a que nuestro Himno Nacional, tan hermoso y que cantamos con tanto fervor patrio, fue el resultado de un concurso hecho ni más ni menos que por el presidente Antonio López de Santa Anna (incluso, había algunas estrofas en donde se alababa a Su Alteza Serenísima, que fueron borradas en la versión moderna). Si se aplicara a nuestro símbolo musical nacional el mismo rasero, ¡ya tendríamos que estar pensando en un himno lopezobradorista!

2. El Himno de Veracruz fue escrito por el maestro Francisco Morosini Cordero, un reconocido académico de la Universidad Veracruzana. Tomo del Diccionario Enciclopédico Veracruzano de Roberto Peredo (por cierto, una obra magnífica que contiene información acuciosa sobre nuestro estado y sus personajes relevantes) la semblanza de este valioso personaje:

“Escritor (poeta, narrador). Nació en Coatzacoalcos el 20 de noviembre de 1946 y murió en Ciudad de México el 30 de diciembre de 2006. Combinó la docencia, la literatura, el periodismo y el servicio público. Director de la Facultad de Comercio y Administración de la Universidad Veracruzana en Coatzacoalcos; Director general de Trámites Escolares de la UV, y de Asuntos Ecológicos del Estado de Veracruz. Presidente de la Escuela de Escritores de Veracruz (2003).”



“Obra: Poeta del mar; De memoria; De amores y circunstancias; El frágil recuerdo; Cantos para Navidad; Retazos de naturaleza; Jardín de Letras.

3. El autor de la música es Ryszard Siwy Machalica, catedrático de la UV desde hace 40 años, del que podemos leer que “es maestro acordeonista concertista por la Academia Federico Chopin de Varsovia; ha sido pianista, acordeonista y arreglista del Trío Varsovia; participó como pianista y arreglista en el Festival Europalia 93, en Bélgica.

“Imparte la materia Análisis Musical Avanzado en el Centro Mexicano de Posgrado en Música, de Puebla, y es miembro de la Sociedad de Autores y Compositores de Música.



“Ha escrito música para teatro, cine, conciertos de música clásica, tanto en Polonia como en México. Ha diseñado alrededor de 16 programas de estudios de diversas materias de su Facultad; elaboró el test de aptitudes musicales para el examen de admisión. Es maestro de tiempo completo de la UV desde 1979.”

Como se ve, ambos personajes son reconocidos profesionales en su campo, uno un gran poeta oriundo de nuestra tierra y el otro un músico clásico radicado con nosotros desde hace muchos años, lapso en el que ha derramado su conocimiento y su talento a través de la enseñanza musical a muchas generaciones de jóvenes veracruzanos.

Si me permiten, la próxima semana sigo con el tema, porque se me acabó el espacio para esta ocasión.



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