Sergio Obeso Rivera, una vida dedicada al servicio de la Iglesia Católica

El obispo emérito de Xalapa, Sergio Obeso Rivera y quien será elevado al más alto título honorífico que puede conceder el Papa, nació en Xalapa, Veracruz, el 31 de octubre de 1931.

Obeso Rivera ingresó al seminario el 23 de enero de 1944 y luego de terminar sus estudios de Humanidades, viajó a Roma para inscribirse en un curso de Filosofía y Teología, en la Pontificia Universidad Gregoriana.

Fue ordenado sacerdote el 31 de octubre de 1954 y meses después regresó a México para prestar sus servicios en el Seminario de Xalapa, hasta 1971; ahí fue Prefecto de Filosofía, Director Espiritual y Rector.



El 30 de abril de 1971, el Papa Pablo VI lo designó Obispo de Papantla y a casi tres años del nombramiento, el mismo Papa lo nombró Obispo Coadjutor de la Arquidiócesis de Xalapa, con derecho a sucesión.

Sergio Obeso ha logrado destacar como protagonista de la Iglesia mexicana, pues fue elegido Presidente de la Conferencia del Episcopado para el periodo 1983-1985 y reelecto para el 1985-1988.

En 1995, fue reelecto de nueva cuenta en ese puesto, donde se mantuvo hasta 1997.

Al interior de la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM), Sergio Obeso se desempeñó como responsable de las comisiones Episcopal del Clero y de Pastoral Social, en distintos periodos.

Sin embargo, tras sobrepasar el límite de edad jubilatoria, el 10 de abril de 2007 el Papa Benedicto XVI aceptó su renuncia como Arzobispo de Xalapa y tomó su lugar Hipólito Reyes Larios.



Obeso Rivera ha sobresalido por ser uno de los grandes responsables de la canonización del primer santo latinoamericano, San Rafael Guízar y Valencia e incluso escribió el libro biográfico de Guízar y Valencia en su nueva edición, en el año 2006.