Alrededor de 300 integrantes del Sindicato de Telefonistas de la República Mexicana caminaron desde la avenida Ávila Camacho hasta la Plaza Lerdo, mostrando su inconformidad por la Reforma Laboral que los priístas aceptaron en el Congreso de la Unión.
El presidente del comité local, Ángel Flores, dijo que las iniciativas afectan derechos fundamentales básicos e históricos de los trabajadores, como la contratación colectiva, la mejora en los salarios, el derecho a huelga y la seguridad de tener un empleo.
Informó que se unen a las manifestaciones que se están dando en todo el país, por parte de diferentes sindicatos, por la misma causa.
Detalló que la reforma no protege a los sindicalizados, sino a los corporativistas.
En la Plaza Lerdo gritaban consignas en contra de los diputados priístas, solicitando más empleo y no una reforma.