Tiempos violentos, injusticias, opresiones, son cadenas que esclavizan: Padre Luciano Conde

“Sufrimos injusticias, vivimos tiempos violentos, momentos tristes, de opresión, el Señor quiere liberarnos y precisamente por eso viene a intervenir en la historia para darnos libertad. Dios tiene el mismo designio de liberarnos hasta el día de hoy. Quiere ver a su pueblo gozar de la libertad, la justicia y la paz”, señaló el padre Luciano Conde, vicario de la Catedral de Xalapa.

Durante su homilía dominical, refirió que mediante el acto redentor Dios hace libres a los fieles; no obstante, pareciera que son los propios seres humanos quienes aman sus ataduras, sus cadenas y les pasa lo que al pueblo de Israel, quienes no supieron qué hacer con su libertad.

“No sea que nos pase que no sepamos qué hacer con nuestra libertad, como al preso. Los que somos libres tenemos la gran tarea de forjar una sociedad cada vez más humana, justa y fraterna. Dios nos invita a vivir en una tierra de paz, reconciliación y abundante”.

En ausencia del arzobispo de Xalapa, Hipólito Reyes Larios, el padre Luciano explicó que de estas enseñanzas sale el llamado de Dios a sus fieles para abrir los ojos, corazón y oídos, sobre todo para aceptar la libertad y dejarse liberar de sus propias esclavitudes.

“Hace falta que todos formemos esta sociedad cada vez más justa. Todos tenemos el deber de luchar por la justicia desde nuestro trabajo, escuela, familias, cámaras de diputados, desde dónde estemos. Nadie debe sentirse excluido para luchar por la justicia”.

En este contexto, el padre Luciano que por eso es necesaria la reconciliación sin dejarse llevar por el egoísmo. De ahí la invitación de Dios a la conversión y transformarse para bien, no para mal, sobre todo para ser capaces de liberarse de sus ataduras y liberar así el entorno.

Mencionó que mucho influye el contexto en cada ser humano, ya que cuando el entorno no está bien, no puede gozar de la libertad de su espíritu.

“Una persona, cuando se deja abatir, todo el entorno se viene abajo. Cuando vive en la depresión, todo su entorno se vuelve un desastre; por el contrario, cuando tenemos esa actitud positiva, esas ganas de vivir, todo lo transformamos”.

Finalmente, el padre Luciano recomendó a los fieles dejar entrar a Dios en sus vidas, ya que sólo de esa forma se podrán entender sus mensajes, se podrá abrir el corazón, romper ataduras y abrir la vida a la gracia para vivir tiempos de paz.