Trabajadores del INAH ignoran el destino de los ingresos por la Cumbre Tajín

A más de once años de haberse instaurado la celebración de la Cumbre Tajín, ningún beneficio ha reportado para la milenaria zona arqueológica, mucho menos a los indígenas que viven en los alrededores de la misma, los cuales cada vez que se realiza esta “actividad cultural” son discriminados e ignorados por las autoridades correspondientes.

De las ganancias que se han obtenido en los 11 eventos, se desconocen su paradero, así como las aportaciones que el gobierno estatal ha otorgado al Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) en todo este tiempo, hay opacidad en su destino y sólo se argumenta que se están realizando los proyectos, pero se desconocen sus alcances.

Roberto Pérez García, representante de la delegación del Sindicato los Trabajadores Administrativos, Técnicos y Manuales al servicio del INAH, adscritos a esta zona arqueológica de El Tajín, expresó que la falta de claridad en el destino de los recursos generados por esta celebración ha propiciado la exigencia del sindicato a nivel nacional para que se informe el uso que se le ha dado a ese dinero.

“En la actualidad nos dicen que existe ese dinero y que no se ha podido invertir en la zona arqueológica, pero seguimos en pie de lucha, seguimos pugnando porque toda esa cantidad se invierta en la mejoría de la zona arqueológica”, puntualizó el líder sindical.

Entrevistado en las instalaciones del Museo de Sitio de la zona arqueológica, Pérez García refiere que son mínimos los beneficios que esta zona arqueológica ha tenido con la celebración de la Cumbre Tajín, porque es notorio que las pirámides y demás estructuras prehispánicas que existen en este sitio, están muy deterioradas por el paso del tiempo.

“Si ustedes visitaron el sitio, ven que no hay señalización, no hay cédulas de información, no hay un recorrido bien establecido, los monumentos están muy deteriorados, el Museo de Sitio se está cayendo a pedazos, las bases las mamparas de madera están deterioradas, o sea no hay esa inversión o querer darle una imagen diferente tanto al Museo de Sitio de El Tajín o a la zona arqueológica”, abundó.

Por cuanto a la generación de empleos y beneficios en materia social y de infraestructura que se les otorgarían a los habitantes de la región, Pérez García enfatizó que esto no se ha visto.

“Ellos argumentan que crean 7 mil empleos con la realización de este evento, desafortunadamente en los hechos, nosotros que estamos aquí para decir que es todo lo contrario, la mayoría de la gente que labora en ese periodo, algunos extranjeros, antes eran mucho más, ahora ya disminuyó la cantidad de extranjeros, franceses sobre todo, el resto son técnicos son ingenieros, pero no de aquí de la región, quiero entender que vienen de la ciudad de México”, puntualizó.

“Además, desde el primer evento que se realizó, el gobierno del estado argumentó, y en su oportunidad también lo hizo Fidel Herrera, que con estos eventos se iban a beneficiar en cuanto a infraestructura social las comunidades, hay cinco comunidades aledañas a la zona, como lo es el Barrio San Lorenzo, Ojital Nuevo, San Antonio Ojital, El Zapotal y El Tajín principalmente.”

“Sin embargo, en estas comunidades no se cuenta con infraestructura; hay una comunidad, la de San Antonio, que está en la parte norte de la zona arqueológica, que está muy marginada, apenas les acaban de introducir la electrificación, no tienen agua potable, no tienen vías de comunicación no hay servicio médico, no hay nada, sin embargo en los medios de comunicación se dice que todas las comunidades aledañas al sitio cuentan con todos los servicios sociales que deberían tener derecho, desafortunadamente no es así”, subrayó.

- Tengo entendido que parte de esos recursos que se generarían se utilizarán para darle más vida a esta zona arqueológica ¿Qué tan cierto es esto? Se le preguntó.

- Desafortunadamente así se ha venido comentando, sin embargo, el dicho es una cosa y el hecho es todo lo contrario, respondió.

Reiteró que ha habido muchos proyectos, desafortunadamente han quedado en eso, no ha habido un planteamiento en tinta y papel

- ¿El dinero que se ha generado qué destino ha tenido? Se le cuestionó.

- Esa es la incógnita que tenemos, inclusive como sindicato a nivel estatal y nacional hemos estado gestionando y la última respuesta que nos dieron es que ese dinero existe. En un principio Miguel Alemán Velasco daba 2 millones de pesos al INAH por la realización de este evento y en la actualidad nos dicen que existe ese dinero y que no se ha podido invertir en la zona arqueológica, pero seguimos en pie de lucha seguimos pugnando porque toda esa cantidad se invierta en la mejoría de la zona arqueológica.

- ¿El actual gobierno, tanto federal como estatal, que han otorgado para mejorar la zona arqueológica?

- Desafortunadamente no les ha interesado, en el sentido de poder coadyuvar en la preservación de la zona. En este caso el gobierno estatal lo único que le ha interesado es lucrar con el patrimonio cultural de Veracruz, aseveró.

-¿Que se espera, porque tengo entendido que la Cumbre Tajín continuará en los próximos años? Se le insistió.

- Según lo que declaró Fidel Herrera en días pasados que hay un presupuesto para la realización de tres Cumbres Tajín mas, afortunadamente nosotros estamos insistiendo que queremos respeto a la normatividad, ya no queremos que se sigan realizando estos eventos dentro de la zona arqueológica. Creemos que hay otras alternativas y otra forma de difundir el patrimonio cultural y hacer la difusión para que el turista baje a visitar la zona arqueológica de El Tajín. Hay muchas formas y en ese sentido seguimos insistiendo y ojala en un futuro muy cercano se deje de seguir presentando este tipo de eventos en la zona arqueológica.

Finalmente, propuso que en el área denominada parque temático, se edifiquen monumentos artificiales que simulen ser la zona arqueológica de El Tajín y ahí se realicen este tipo de eventos para no dañar más a las pirámides y demás estructuras existentes en el sitio, a fin de que las futuras generaciones puedan admirar su majestuosidad.