Buenas tardes,
Tengan todos una bonita tarde quisiera llamar la atención de las autoridades correspondientes respecto a que en toda la zona de lo que son los Sauces y el Ferrocarrilero y Clínica 66 no nos permiten hacer un poco de sitio a nosotros los servidores del volante.
Nuevamente se les ocurre hacer operativos a los Policías Viales y elementos de Tránsito en estas zonas y por ningún motivo nos permiten estacionarnos un momento. Nosotros lo que buscamos es ahorrar un poquito de gasolina ya que esta carísima para poder llevar unos cuantos pesos a nuestras casas. Lo hacemos de la manera más honesta no nos gusta robar, queremos ganarnos la vida por las buenas por eso somos gente de trabajo y a la hora que usted guste (lector y autoridades) estamos para servirles las 24 horas del día arriesgándonos a ser asaltados.
En mi caso soy mujer y tengo que aguantar borrachos, pandilleritos y palabras obscenas de mal educados que cuando ven que el taxi es guiado por una dama piensan que somos unas “facilotas” por dedicarnos a esto y algunos hasta tratan de tocarnos.
Estamos ahí porque no tuvimos de otra y porque preferimos manejar que hacer cosas indebidas que afecten nuestra salud y principios. Pero esto no les importa a las autoridades, a quienes se les hace fácil quitarnos a su antojo aunque no estemos estorbando.
Por Dios, acaso los elementos de Tránsito y Policías Viales no se van de vacaciones, preferíamos que se fueran a vacacionar y nos dejen descansar ahorita en Semana Santa, porque con todo respeto cuando no hay elementos de Tránsito sentimos que estamos en el paraíso santísimo de Dios, ¿y esto saben por qué?, porque si están es como si no estuvieran. No trabajan se la pasan parados, hablando por celular, platicando con las mujeres que pasan y permitiendo que autobuses y transporte de alto peligro pasen por nuestra ciudad poniendo en alto riesgo nuestra integridad física, pero esto no importa verdad, flamantes autoridades.
Nada más importa mantener el orden sólo en dos calles en Xalapa para que vean que están laborando, por muchas más razones cuando se nos acercan dan ganas de darles una golpiza de su tamaño, o mínimo refrescárselas a ustedes y su patrón.
Gracias por las atenciones.
Sra. Camila Angélica Reyes Simón.