Tras casi 20 años de trabajar en el Acuario de Veracruz, la corren al conocerse su embarazo

Desde que la Presidencia del Consejo Administrativo del Acuario de Veracruz fue renovada con la llegada de Baltazar Pazos de la Torre, en mayo del 2017, más de 120 empleados de esta empresa público-privada han denunciado de forma anónima, en redes sociales o vía mensajes de WhatsApp, hostigamiento y maltrato laboral.

Sin embargo, en esta ocasión la nueva administración pudo haber incurrido en discriminación y violencia de género al despedir a la exjefa de Promoción e Imagen del Acuario, Rosa Valentina Palma Sesma, quien tras anunciar su embarazo fue informada sobre su despido.

En rueda de prensa, la joven afectada comentó que fue el pasado 10 de agosto cuando notificó a sus jefes inmediatos que tenía 15 semanas de embarazo, pero en ese momento el gerente general, Armando Fernández Rangel, le informó que por órdenes de sus superiores quedaba despedida.



"Para mí era una buena noticia informarles a mis amigos, compañeros y a mi jefe de mi embarazo. Justo en ese momento me dijeron que ya no requerían mis servicios, que ya no querían que trabajara en esa institución. Llevo 18 años ahí y de esos 12 estuve a cargo del área de Comunicación e Imagen. Me indigna ser víctima de este trato discriminatorio”, dijo.

Palma Sesma comentó que esta situación, aunada al estrés y hostigamiento que sufrió a lo largo del año de la nueva administración del patronato del acuario, provocó que registrara una amenaza de aborto que terminó por hospitalizarla. Actualmente, su estado de salud y el de su bebé no son estables, pues el hecho de ser despedida ha repercutido fuertemente en su estado anímico y físico.

“He estado a punto de perderlo. Tengo amenazas de aborto, estuve hospitalizada dos días en el Seguro Social y me dieron cinco días de incapacidad; por lo que no se le dio seguimiento a mi despido. Regreso el lunes a laborar y nuevamente a mi jefe le dan la indicación desde arriba de que me despidan. Yo les digo que no, que por qué, porque necesito y quiero mi trabajo”, dijo.



Detalló que al momento de despedirla le extendieron un cheque y la querían obligar a firmar su renuncia, pero se negó, pues la empresa ni siquiera dio una justificación de por qué no requerían de sus servicios. La agraviada comentó que además de su caso, seis personas que llevaban años laborando al interior de este recinto también fueron despedidas injustificadamente, pero no ventilaron su situación por temor a represalias.

Además, aseguró que todo el personal del Acuario de Veracruz sufre maltrato por la nueva administración, como falta de equipo y material para trabajar, trabajos forzados y horas extras que no se les pagan; además de constante hostigamiento. No obstante, aclaró que no tiene rencor contra la institución donde ha trabajado 18 años, ya que quienes han maltratado al personal son los de la nueva administración, encabezados por Baltazar Pazos de la Torre.

“Nosotros queremos mucho al Acuario, siempre hemos trabajado en pro de la vida animal pero es el personal nuevo el que nos está maltratando, hay estrés y sometimiento laboral por parte de la nueva administración”, agregó.



Palma Sesma mencionó que ya interpuso una denuncia ante la Secretaría de Trabajo y Previsión Social (STPS) para aclarar la situación, pues reiteró que la corrieron sin justificación y estando embarazada, lo que sería violencia de género. Además, dijo temer por su integridad y la de su familia.

“Hago responsable a Baltazar Pazos de la Torre, a Carlos Lugo Oropeza y a Manolo Rodríguez por toda la presión. Tengo dos amenazas de aborto, los responsabilizo de mi persona, de mi familia y de mi bebé. Temo por mi integridad, la de mi familia, mi persona y la de mi bebé que siente todo este estrés, este maltrato y depresión. Yo necesito trabajar para llevar una vida digna y pido ayuda al Gobernador, al electo también y a las dependencias de ayuda a la mujer”, resaltó.

También abogó por sus compañeros, ya que reconoció que no quieren alzar la voz ante el temor de ser despedidos, pese a que viven hostigados y maltratados por la nueva administración.



Cabe destacar que el Acuario de Veracruz es operado con un fideicomiso que depende de la Secretaría de Desarrollo Económico y Portuario del Gobierno del estado de Veracruz. Además, de acuerdo con la Ley Federal del Trabajo, en su Artículo 133, queda prohibido a los patrones o sus representantes despedir a una trabajadora o coaccionarla directa o indirectamente para que renuncie por estar embarazada.