Sin una explicación oficial, la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) desactivó el retén que de manera permanente estaba ubicado en el módulo de vigilancia del entronque de la carretera estatal Álamo-Castillo y la vía federal Álamo-Tihuatlán.
Desde el 24 de junio del año pasado, la SSP asignó a personal de la Policía Estatal en el sitio, donde antes operaban elementos de la extinta Fuerza Civil (FC), quienes fueron denunciados reiteradamente por presuntos atropellos y excesos contra la ciudadanía. Tras el retiro de la FC, la caseta de vigilancia quedó abandonada varias semanas hasta que la Policía Estatal tomó el control. Sin embargo, los elementos de esta corporación también fueron acusados de incurrir en abusos contra la población.
Las denuncias de abusos policiacos en este módulo persistieron en la recta final de la administración de Cuitláhuac García Jiménez. No obstante, con el inicio del gobierno de Rocío Nahle, las quejas ciudadanas por atropellos de los uniformados cesaron relativamente. Finalmente, la SSP retiró al personal que operaba en este módulo, el cual ahora luce vacío e incluso borraron los logotipos de la corporación, sin que se explicaran los motivos.