Tras toma de CAEV por habitantes, SIOP anuncia reencarpetado de carretera, en Álamo

Tras varios días de protestas por parte de habitantes de la ruta Álamo-Ojite, el Gobierno del Estado anunció el reencarpetado total de la carretera estatal, lo que permitió destrabar el conflicto que mantenía tomadas las instalaciones de la CAEV en El Xúchitl desde el 2 de diciembre.

La infraestructura hidráulica ubicada en ese punto abastece de agua a Tuxpan, por lo que la movilización de las comunidades había generado una fuerte presión ante el riesgo de que alrededor de 160 mil habitantes de Tuxpan se vieran afectados.

El titular de la SIOP, Leobardo Cornejo Serrano, acudió al punto de bloqueo junto con el subsecretario de Gobierno, José Manuel Pozos Castro, el alcalde electo Pepe Arenas y la diputada local Imelda Garrido. Durante la reunión, habitantes expusieron que el deterioro de la carretera se agravó por la instalación de una línea de conducción de 40 pulgadas, que incrementó el suministro hídrico hacia Tuxpan, sumado al tráfico pesado y años de falta de mantenimiento.



Ante estas demandas, Cornejo Serrano confirmó que los trabajos iniciarán el martes en el entronque con la carretera federal Tuxpan-Tampico, avanzarán hacia el puente Ojite y continuarán hasta la comunidad El Aguacate, prácticamente a la entrada de Álamo.

Subrayó que no se trata de bacheo, sino de un reencarpetado completo, y anunció además la colocación de luminarias solares en el puente Ojite, una demanda recurrente de la población debido a la oscuridad total que prevalece en ese tramo.

Pepe Arenas destacó la intervención de la gobernadora Rocío Nahle al enviar a los funcionarios al diálogo y detalló que se rehabilitarán 21.4 kilómetros de carretera, además de retomarse la construcción del bulevar Emiliano Zapata en Montes de Oca. Añadió que persiste la gestión de asuntos federales como el censo de daños por las inundaciones del 10 de octubre y el saneamiento por derrames de hidrocarburo, pese a que PEMEX asegura haber concluido esos trabajos.



Durante la reunión, Marlene Romero Machuca, agente municipal de Montes de Oca, aclaró que nunca se cerraron las válvulas de agua y que la toma de instalaciones fue únicamente una medida de presión ante el abandono de la vía. Asimismo, agradeció la disposición de las autoridades y reiteró que la movilización buscaba respuestas inmediatas para las comunidades afectadas.