Como siempre, deseo expresar mi gratitud al medio electrónico de Alcalorpolitico al darles libertad a los ciudadanos para expresar de forma abierta inquietudes e inconformidades de la sociedad veracruzana.
Sin más preámbulo, quisiera hacer mención de una nota periodística de un conocido medio impreso que trascendió a la era digital, que en su edición de Veracruz del día lunes 27 de abril de 2015, publica una nota titulada "Presumen funcionarios, políticos y catedráticos de la UV títulos académicos sin aval de la SEP". La nota, con detallada investigación, pone en entredicho la "honorabilidad" si es que pudiese existir, de algunos funcionarios del Gobierno del Estado de Veracruz que se ostentan con títulos académicos inexistentes, rubricando documentos oficiales con grados de licenciado, maestro o doctor que muchas veces no ostentan.
Cómo olvidar el caso de Pedro Montalvo Gómez, titular del Instituto de Espacios Educativos, que de la noche a la mañana, le apareció el título de Licenciado en Ciencias de la Educación después de haber sido exhibido por conocida periodista local en marzo de este mismo año al no tener título profesional y contravenir lo dispuesto por la Ley Orgánica del Poder Ejecutivo del Estado de Veracruz en su artículo 7 fracción II:
"Artículo 7. Para ser titular de cuales quiera de las dependencias o entidades de la Administración Pública del Estado se requiere:
II. Contar con título profesional expedido por autoridad o institución legalmente facultada para ello.
Un par de artículos más en estos meses ha hecho eco (como el que menciono que se publicó el 27 de abril por otro medio) pero alguien se ha preguntado... ¿Y la impartición de Justicia?
Conocido es que muchos integrantes del Poder Judicial de Veracruz se dicen ser maestros o doctores queriendo darle más renombre al honorable cargo de Magistrado.
Como requisito para ser Magistrado, la Constitución Política del Estado de Veracruz, en su artículo 58, fracción III cita a la letra:
"III. Poseer, al día del nombramiento, título de Licenciado en Derecho expedido por autoridad o institución legalmente facultada, con una antigüedad mínima de cinco años, y contar, preferentemente, con estudios de posgrado, o con experiencia profesional en la judicatura o ejercicio de la profesión no menor de ese lapso."
Bajo la consideración antes mencionada, cabe hacer un análisis de los impartidores de Justicia utilizando el portal de consulta de Cédulas Profesionales de la Secretaría de Educación Pública en la dirección electrónica http://www.cedulaprofesional.sep.gob.mx/.
Es alarmante ver cuántos magistrados se autonombran maestros o doctores en los oficios que ellos firman para diferentes efectos.
Con el grado de doctorado reconocido por la SEP tenemos únicamente a los magistrados Raúl Pimentel Murrieta y Vicente Morales Cabrera.
Con el grado de maestro reconocido por la SEP están los magistrados Alejandro Gabriel Hernández Viveros, Irma Dinorah Guevara Trujillo, Yolanda Cecilia Castañeda Palmeros y el consejero Javier Hernández Hernández.
Con el título de licenciado en derecho reconocido por la SEP se encuentran los magistrados:
Alfredo Algarín Vega
Andrés Cruz Ibarra
Arnulfo Emilio Polanco Servín
Amadeo Flores Villaba
Antolín Samuel Mauro Baizabal Maldonado
Andrés Salomón Rodríguez (quien se ostenta como doctor)
Beatriz Rivera Hernández
Dionisio Florencio Gutiérrez García
Edel Humberto Álvarez Peña
Edgar Mauricio Duck Núñez (Consejero que quedó en lugar del Lic. José Luis Salas Torres)
Emma Rodríguez Cañada
Eugenio Vázquez Hernández
Fernando Charleston Salinas
Fernando Augusto Guzmán Calvo
Gladys de Lourdes Pérez Maldonado
Gilberto Ignacio Bello Nájera
Ignacio González Rebolledo
Irma Medel Barragán
Julio César Díaz Hernández
Jorge Espinoza Castillo
José Luis Ocampo López
Leonardo Cruz Casas
Marco Antonio Lezama Moo
Martha Ramírez Trejo
Onésimo Fernández Campos
Raúl de la Huerta Valdés
Reynaldo Madruga Picazzo
René Poblete Dolores
Sara Hilda Beltrán Ramos
Y para rematar, hay casos de magistrados de los que la SEP NO tiene registro alguno como lo son:
Concepción Flores Saviaga
Eduardo Andrade Sánchez (según doctor)
Miguel Gastón Manzanilla Pavón
Pedro Luis Reyes Marín
Roberto Armando Martínez Sánchez
Víctor Manuel César Rincón (según él, también doctor)
¿Cuál fue el fundamento para nombrar magistrados a los 6 ciudadanos anteriormente mencionados? Los dos "doctores" fueron nombrados en las dos recientes administraciones estatales. ¿A quién le deben sendos favores Fidel Herrera Beltrán y Javier Duarte de Ochoa para pagar con este tipo de aberraciones que sólo laceran la administración de Justicia?
¿Quién será el encargado de explicar por qué estas personas son magistrados sin reunir los requisitos necesarios?
¿Quién va a explicar cuál fue la sanción para el señor César Rincón por el caso tan sonado del amaño de exámenes para las plazas de jueces de primera instancia efectuado en 2012?
¿En manos de quién está la impartición de Justica en Veracruz? Ahora ya tan politizada.
La fracción IV del artículo 58 de la Constitución Política del estado de Veracruz además menciona que se debe de "gozar con buena reputación". ¿Acaso ya tan pronto se olvidó que el 1 de diciembre de 2000, tras perder el PRI la Presidencia de la República ante el PAN, el entonces diputado federal (ahora por desgracia magistrado) Eduardo Andrade Sánchez irrumpió, en estado de ebriedad, en un programa conducido por Joaquín López-Dóriga haciendo el ridículo?
Aplaudo la iniciativa de distintas asociaciones civiles de acercarse al diputado Cuauhtémoc Pola para solicitar una reforma que permita que los magistrados sean propuestos por el Poder Judicial, que sean mujeres y hombres de carrera judicial, no políticos con la pólvora más que quemada. Esto es por el bien del Poder Judicial, por ganar la confianza de la gente que busca justicia en las instituciones del Estado.
Pobre Poder Judicial, que ya perdió el título de Honorable.
Atentamente
Nombre (…)
Un ciudadano que no ostenta grados que no obtuvo
Solicito de favor la omisión de mis datos de contacto, por temor al poder de estas personas, sobre todo los de pasado político.
Teléfono (…)