Tres millones de niños tienen que trabajar y casi la mitad de ellos, no reciben un pago

En México hay tres millones de niños que trabajan, de los cuales un 47.2 por ciento lo hacen sin recibir un pago, reportó el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), por lo que es necesario buscar mejores condiciones para que no se vean forzados a desarrollar actividades laborales.

“Los niños deben gozar de todos sus derechos,debería existir una mayor conciencia social y responsabilidad de las autoridades para erradicar el trabajo infantil,”, señaló, Mónica González Contró, del Instituto de Investigaciones Jurídicas (IIJ) de la Universidad Nacional Autónoma de México.

Señaló que en el país no existen mecanismos de protección quesalvaguarden las garantías

de los infantes y adolescentes por lo que es necesario trabajar en políticas públicas, apoyadas con asignaciones presupuestales suficientes.

Informó que los datos de la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo de 2009, señalan que de los menores entre cinco y 17 años trabajan, el 66.9 por ciento son varones y el 31.1 por ciento niñas, de los cuales un millón 200 mil no asisten a la escuela.

La especialista refirió que cuando los niños son explotados se interfieren derechos como educación, juego y salud, ya que en ocasiones están bajo condiciones que los privan de su niñez, potencial, dignidad, incluso llegan a ser perjudiciales para su desarrollo físico y psicológico.

También pueden llegar a interferir con su escolarizaciónporla dificultad de

asistir con regularidad a clases, incluso son obligados a abandonar la escuela de forma prematura o se les llega a exigir combinar el estudio con una labor pesada que requiera de mucho tiempo.

Hay casos donde los padres trabajan y las niñas son quienes tienen que encargarse del cuidado del hogar yde los hermanos menores, por lo que se ven imposibilitadas para asistir a la escuela, además asumen responsabilidades que no les corresponden.

En el caso del trabajo doméstico, las niñas son más afectadas. Si los padres tienen que salir a trabajar, les encargan el cuidado de hermanos menores y las tareas del hogar. “Si no pueden asistir a la escuela, cumplir con sus tareas y además asumen responsabilidades que no corresponden a su edad, estamos frente a casos de explotación”, puntualizó la especialista.

Añadió que tanto la Carta Magna como la Ley Federal del Trabajo establecen para el país la edad de 14 años como la mínima para integrarse a las actividades productivas. Además, se cuenta con la Convención sobre los Derechos del Niño, “tenemos un marco legal, sin embargo, los niños desempeñan laborales en el sector informal o en el sector formal, sin ninguna protección de las leyes”.

No obstante, en ocasiones no se cumplen estas normas por lo que los niños pierden su infancia en labores que no deberían, y eso es lo que hay que regular.