Un caso de acoso por parte de un docente de la Facultad de Educación Física, Deporte y Recreación de la Universidad Veracruzana (UV) ha generado preocupación y desilusión entre el alumnado, luego de que el profesor señalado recibiera una suspensión de apenas 15 días y continuara impartiendo clases sin cambios en su actitud.
La percepción generalizada entre los estudiantes es que el proceso implementado por las autoridades universitarias fue ineficaz, lo que sugiere una posible tolerancia o encubrimiento ante este tipo de conductas.
La consejera alumna de la Facultad, Jéssica Martínez Escamilla, señaló que el docente en cuestión no sólo incurre en acoso, sino que ha denigrado y humillado a alumnas con comentarios sobre su apariencia física. “El profesor les dice que están muy bonitas, les dice que si quieren pasar la materia. Ahora sí que las ofende, les dice que están gordas, ‘te ves más gorda el día de hoy’, ‘¿por qué te ves así?’. Tipo piropos, pero también humillantes”, dijo.
Agregó que, si bien la mayoría de los reportes provienen de mujeres, también ha habido casos de agresiones verbales hacia hombres, a quienes el docente les dice cosas como “estás gordo”, “estás obeso”, “¿qué haces en esta carrera?”. Sin embargo, señaló que los alumnos varones son renuentes a alzar la voz.
Precisó que al menos 3 o 4 alumnas sí presentaron un reporte formal. La queja fue entregada al Director de la Facultad e incluso escaló a Xalapa, pero lamentó que, pese a la seriedad de las acusaciones, el resultado del proceso no fue el esperado. El docente, cuyo nombre y materia no se revelan por motivos de presunción, es descrito como una persona de edad avanzada que no se jubila y que, tras la suspensión de 15 días, regresó a dar clases con la misma actitud.
Estudiantes afectados y otros compañeros han optado por evitar tomar clases con el profesor y prefieren inscribirse en materias impartidas por otros docentes para no tener contacto con él. La consejera alumna lamentó que la autoridad universitaria no impusiera una sanción acorde con la magnitud del caso, lo que, dijo, desincentiva a los estudiantes a denunciar. “Ya acabó, ya terminó, pero pues nada más le dieron 15 días (de suspensión) al profesor”, finalizó.