Víctimas de Bullying, son propensas a ser agredidas por problemas psicológicos

Eva María Cuellar Tejeda, sicóloga, terapeuta y catedrática de la licenciatura en Criminología y Criminalística del Instituto Veracruzano de Educación Superior, mencionó que existe una predisposición sicológica para que alguien se convierta en víctima de acoso o Bullying, ya que no tiene sentadas las bases de su formación integral.

“Sabemos que el victimario elige a su víctima, de alguna manera la víctima tiene determinados elementos que hacen que se someta. Principalmente lo hacen por miedo, intimidación o acoso”, declaró.

La especialista señaló que la víctima sufre, ya que el victimario puede decirle que aunque hable, nadie lo va a defender, cosa que en muchas ocasiones no es verdad.

“Si vemos que esta persona viene de una familia disfuncional, de una infancia ya no en desarrollo sino subdesarrollada, donde no aprendió, donde nunca le enseñaron cómo era marcar un límite y poder enfrentarse a situaciones adversas seguro tendrá esta actitud predispuesta para ser víctimas”, precisó.

Respecto a las implicaciones sicológicas afirmó que tanto el victimario como la víctima sufren cada uno desde su papel, “son bastante aterradoras, ambos sufren rechazo, baja autoestima, aislamiento y por eso la intervención debe ser para ambos, que aprendan a cómo ser una mejor persona, trascender ambos roles, ni quiero ser víctima ni quiero ser victimario, simplemente una persona como cualquier otra”.

Comentó que hay cuatro tipos de agresión que pueden diferenciarse y que todos los seres humanos presentan.

La primera es la defensiva, que por naturaleza todos los seres humanos tienen, “si van a tropellar a mi hijo qué hago, corro y lo abrazo aunque pase por todos sin darme cuenta. Eso no es Bullyng es una conducta defensiva, instintiva y adaptativa”.

La pasiva es la que usa la mayoría de la gente, “cuando no sabemos qué decir, nos tornamos indiferentes, evadimos, no decimos las cosas; es un tipo de agresión que siempre se da entre maestro alumno, padre hijo, siempre habrá un vínculo”.

El tercer tipo de agresión es la proyectiva que se da mucho en el ambiente laboral, “existe la problemática de relación entre jefe y subordinado; el subordinado no sabe cómo poder manejar una situación de oficina, llega a su casa y trasciende la agresión con su familia, Se desquita con la familia por lo que el jefe le hizo o no le hizo porque a lo mejor el empleado malinterpreta la postura del jefe”.

El último tipo de agresión es la sexual donde hay acoso sobre todo en menores, no obstante no siempre se les cree, “aquí la relación no está en equidad porque el menor siempre es más vulnerable, no sabe a quién recurrir, cómo pedir ayuda. Al menor no se le cree que tenga un acoso sexual en la escuela por parte de su maestro o de un niño mayor”.

Aseguró que hay diversos sitios donde pueden recurrir para encontrar ayuda especializada en caso de ser víctimas de acoso, “hay instituciones que cuentan con apoyo, incluso nosotros en la licenciatura Criminología y Criminalística, contamos con un consejo colegiado que brindará la atención especializada, al menos en un primer momento de orientación y diagnóstico y posteriormente ver qué tratamiento corresponde a cada caso”.

Puntualizó que cuentan con ayuda de sicólogos, criminólogos, pedagogos, abogados, “todos estamos fomentando la prevención”.