Acusan a Fuerza Civil y Marina de cometer robos con tortura contra civiles, en Tlalixcoyan

Moradores de las localidades de Tenacalco y El Súchil, en el municipio de Tlalixcoyan, hicieron un llamado a las autoridades estatales y federales, ya que están siendo víctimas de una serie de abusos de autoridad, incluso robos y hasta casos de tortura por parte de presuntos elementos de la Fuerza Civil y de la Marina que llegaron a dar seguridad, colocando retenes, metiéndose a ranchos, revisando carros y personas de la zona que sólo se dedican a trabajar.

Los últimos casos de abuso por parte de estos servidores públicos ocurrieron el día jueves, a la una de la mañana, cuando arribaron cinco camionetas del destacamento La Tinaja, tres unidades de marinos y 2 patrullas de Fuerza Civil, al kilómetro 11 de la autopista Tinaja-Cosamaloapan.

A ese lugar se le conoce como Las Hamacas, sitio de salida y entrada a la población de Tenacalco, en Tlalixcoyan, donde pusieron un retén de revisión.



Toda persona que pasaba era revisada, pero los elementos sacaron provecho y quitaron celulares, dinero y a algunos civiles hasta los golpeaban por reclamar esas acciones indebidas como servidores públicos.

Incluso cuatro jóvenes fueron salvajemente golpeados y acabaron en el hospital con fracturas y lesiones a causa de la golpiza que presuntamente les propinaron dichos uniformados.

Los moradores de esos pueblos tienen el temor fundado que si los denuncian de forma colectiva, las represalias sean graves, pues ellos son la autoridad.



Los asustados lugareños señalan que van unas doce personas que han sido golpeadas en la misma forma, incluso uno de estos casos se suscitó en la entrada a la población El Súchil, también dentro de municipio de Tlalixcoyan.

Los presuntos Marinos y efectivos de la FC, dicen los afectados, se les meten a las casas, a los ranchos con amenazas de que los van a meter en la cárcel o los van a vincular con actividades ilícitas si dicen algo, se llevan objetos de valor, incluso hasta ganado ha desaparecido, todo con total impunidad.

Los quejosos manifiestan tener temor de salir hasta a trabajar, ya que están asustados y temen ser víctimas de una desaparición de los presuntos guardianes del orden.



Los agraviados permitieron ser fotografiados, sin dar detalles de sus generales, por el temor a las represalias, pero aseveraron que urge la intervención del alcalde, Agustín Lagunes Álvarez y el gobernador, Cuitláhuac García Jiménez.