En el Órgano de Fiscalización Superior (ORFIS) no se ofrecen “soluciones mágicas” para limpiar cuentas públicas ni se “maquillan cifras”, aseveró la auditora general Delia González Cobos.
Aclaró que las observaciones de daño patrimonial se solventan en las instalaciones del ente fiscalizador y con la documentación requerida.
Reconoció que algunos alcaldes notificaron que recibieron la visita de personas que aseguraron ser gestores del ORFIS y ofrecieron limpiar las cuentas públicas.
Aseveró que los señalamientos de presunto daño patrimonial solo se solventan con la documentación que compruebe la aplicación correcta de los recursos públicos.
“A todos los alcaldes (los 212) se les puso en alerta para que no sean sorprendidos con ofrecimientos de soluciones mágicas para limpiar sus cuentas públicas”.
Recordó que al tomar las riendas del ente auditor se hicieron auditorías internas para detectar conductas ilegales y si había exceso de tiempo para emitir las resoluciones, “pero todo eso se fue corrigiendo”.
Además, expuso que en este 2025 hubo una reducción en el número de despachos contables externos con relación al 2024, toda vez que algunos no se les refrendó el registro tener deficiencias en su labor fiscalizadora.
En ese sentido, reconoció que el ORFIS no tiene la capacidad técnica para acudir a los 212 ayuntamientos y a auditarlos, por lo que se debe recurrir a los despachos contables externos, y aprovechó el momento para decir a los diputados, “necesitamos recursos adicionales”.