Alumnos foráneos de UV dicen vivir con miedo en Veracruz-Boca del Río

Luego del multihomicidio ocurrido en Minatitlán, alumnos foráneos de la Universidad Veracruzana (UV) en la región Veracruz-Boca del Río expresaron preocupación por la inseguridad en el Estado y los riesgos al tener que viajar por carreteras.

A su regreso a clases, luego de la temporada vacacional de Semana Santa, estudiantes del campus Mocambo UV mencionaron sentirse inseguros en los traslados desde y hacia sus municipios de origen, en especial hacia el sur de la entidad.

Cuestionados sobre si sienten miedo de volver a sus municipios de origen por el riesgo que implican las carreteras, señalaron los casos de robos generalizados a automóviles y autobuses cuando transitan rumbo a municipios como Playa Vicente, La Tinaja, Tierra Blanca o Tres Valles.



También, estudiantes que viajan desde Xalapa y Nautla mencionan que el recorrido entre el Puerto de Veracruz y esos municipios lo realizan con un poco de temor a que se registre algún hecho de violencia o un crimen en la carretera.

Temen más en Veracruz puerto

La mayoría de los entrevistados afirmó que sienten más peligroso vivir en Veracruz que en sus municipios de origen, debido a la incidencia de crímenes como homicidios dolosos, violaciones, feminicidios y secuestros, así como enfrentamientos entre grupos armados.



“En el puerto hay muchos casos y eventos sangrientos, como feminicidios, por lo que me siento vulnerable, y estoy en estado de alerta todo el tiempo. En cambio en mi ciudad puedo decir que si salgo, a pesar de tener precaución por la costumbre que adquirí aquí, no siento tanto riesgo”, dijo una estudiante que proviene del sur del Estado.

Otra alumna que viene desde Oaxaca, concuerda en el tipo de crímenes que son comunes en el puerto.

“De tiroteos y secuestros de camiones me siento más segura en el puerto. De asaltos, violaciones y feminicidios me siento más segura en Loma Bonita”, dijo.



Comentaron que a pesar de llevar años viviendo y moviéndose por la zona conurbada, la falta de familiaridad con la ciudad y el ambiente cambiante que predomina los hace sentir vulnerables y en riesgo de ser víctimas de algún delito.