Asesinato del abogado Arturo Segura muestra de la inseguridad en que vivimos: Antonio Barat

El homicidio del abogado Arturo Segura Toledano “no es más que una manifestación más de las muchas de las que han dado cuenta los medios de comunicación de la inseguridad que vivimos” pero además revela que la abogacía es una profesión de riesgo.

Esto fue lo que comentó el presidente de la Federación de Colegios, Barras y Asociaciones de Abogados del Estado de Veracruz, Antonio Barat Pérez, quien agregó “en los asuntos que tratamos está en juego la libertad, bienes o intereses de sus representados” y al defenderlos se afectan intereses “eso por eso que la profesión es peligrosa”.

Abundó que el homicidio del abogado Arturo Segura Toledano “mancha la capital de estado” pero deja en evidencia la nula vigilancia que hay por parte del Estado ya que un sujeto pudo entrar, matarlo y darse a la fuga tranquilamente sin problema.

“Lo preocupante es que su despacho está en pleno centro de la ciudad y la agresión deja ver que no hay una vigilancia como se anuncia y eso es un caos.”

Dada la situación de inseguridad que se advierte, dijo, no se descarta la posibilidad de que los abogados comiencen a poner cámaras en sus despachos, a blindar sus autos y que recurran a la contratación de servicios de escolta y apuntó que esa Federación solicitará al gobierno estatal a través de la Secretaría de Gobierno, que destine recursos para apoyar a las asociaciones ya que es sabido que cuenta con recursos para ello.

URGEN MODIFICACIONES LEGISLATIVAS

Antonio Barat Pérez comentó que es necesario que los legisladores dejen de ser indiferentes en cuanto a las necesidades de los abogados y además deben ser más incluyentes a la hora de alentar leyes en beneficio de la sociedad.

Explicó que respecto en materia legislativa, hay diversas modificaciones pendientes, como es el precisar los honorarios de los defensores voluntarios en los casos penales, así como también en los juicios de índole laboral y agraria, pues “la legislación es ajena por cuanto hace a la forma de garantizar los honorarios de los abogados”.

Subrayó que “hay diversas legislaciones que hay que modificar para regular y garantizar lo que realmente le corresponde por sus servicios a un abogado, pero todo esto que pasa por desapercibido para los legisladores. No se han preocupado por alentar la aprobación de ese tipo de necesidades porque todo se ha convertido en populismo para ellos”.

NECESARIA, COLEGIACIÓN Y PROFESIONALIZACIÓN DE LOS ABOGADOS

En otro tema, Antonio Barat dijo que la colegiación de los abogados los protegería en cierta medida contra la vulnerabilidad en la que se encuentran derivado del riesgo del ejercicio de la abogacía, toda vez que les permitiría generar recursos para que ellos mismos pudiesen procurarse medidas de seguridad, pero además habría situaciones favorables agregadas como es propiciar la unión entre los abogados, ya que explicó que el gremio está dividido y no hay un sentido de colaboración real entre ellos.

El abogado resaltó que la profesionalización entre los abogados es algo igualmente necesaria, ya que ello contribuiría a elevar la calidad de los servicios que los profesionales del derecho brindan a la sociedad.

Apuntó que en cuanto a la profesionalización y a la certificación México es una isla de atraso respecto de los demás países del continente latinoamericano, pues en todos se ha implementado estos mecanismos de control de calidad profesional, lo que deriva en que la profesión esté debidamente legitimada en cuanto a la prestación de servicios de abogacía.

Antonio Barat observó además que la colegiación de los abogados blindaría a este gremio contra el coyotaje, ya que a la fecha hay muchas personas que son ser abogados se presentan como tal ante quienes requieren de los servicios de abogacía timándolos y abandonándolos en momentos cruciales del proceso ya sea penal o civil, lo que ha ocasionado que los casos que lleven se pierdan y de ello se deriven condenas injustas contra las que nada puede hacerse ya.

Finalmente, Barat Pérez dijo que es necesario que los legisladores entiendan que antes de aprobar una ley deben tomar en cuenta a los abogados, ya que ellos conocen la realidad social a partir de los conflictos que los llevan a asistir a la sociedad ante los tribunales.

“Que seamos los abogados quienes directamente planteemos la necesidades que realmente privan en la sociedad. Llegan a las cámaras de diputados gente que no conoce la realidad social o sólo conocen necesidades sectoriales y de ese modo nunca van a proponer ni a impulsar leyes acorde a las necesidades reales de la población.”