Bloquean carretera Ixtaczoquitlán – Orizaba, exigen agua potable

La carretera Ixtaczoquitlán – Orizaba, esta mañana fue bloqueada en ambos carriles por habitantes de Ixtac, quienes por espacio de dos horas dejaron sin acceso esta vía, para después marchar hacia Pluviosilla en busca de una solución a su demanda del suministro de agua que fue colapsado por causa de un empresario orizabeño.

Fue al filo de las 10:00 horas cuando un promedio de 80 habitantes de diversas colonias de este municipio, decidieron cerrar la carretera, debido a que exigían que el empresario Joel Jiménez quien tiene un negocio de fibra de vidrio en este municipio, echó arena, tierra y desechos a la tubería de donde reciben el vital liquido los vecinos, provocando con esto que el agua ya no llegara a su destino como debía ser.

“Nos perjudican en la tubería a varias colonias que son: Ixtaczoquitlán viejo, colonia Morelos, Villa Unión Lezama y más, porque no tenemos agua desde hace meses o llega poquito y sólo a algunas casas” expresaron los inconformes.+

Alrededor de las 11:00 horas fue que decidieron marchar con rumbo a la ciudad de Orizaba, a buscar hasta su domicilio al dueño de este negocio de fibra de vidrio, pero al realizar su recorrido fueron provocando un sinnúmero de problemas viales, ya que en algún momento iban ocupando ambos carriles, primero de la carretera de Ixtac y luego de la de Orizaba.

Al llegar a la casa del señor Joel Jiménez, una comisión junto con el alcalde Nelson Votte Ramos entraron a dialogar y recibir un respuesta, misma que fue favorable, toda vez que el propietario de esta mediana empresa, dijo que pondrá personal y maquinaria para limpiar esta zona.

“Vamos a empezar con maquinaria pero vamos a intervenir pronto, porque si esperamos, nos vamos a tardar más con el suministro del agua, debemos de ayudar porque la maquinaria no llega hasta el fondo, pero ya le dimos solución ya podemos entrar al terreno ya tenemos permiso”, precisó Votte Ramos.

Agregó que en la plática sostenida con este hombre, él aceptó que dañó la tubería que suministra el agua a muchas colonias, por ende a miles de habitantes.

En tanto el alcalde Nelson Votte hablaba con el señor Jiménez, los elementos de tránsito de la Delegación de Orizaba, tuvieron que ponerse a trabajar arduamente pues el congestionamiento vial se acrecentó en la oriente 9, que es la zona donde está la casa del dueño de este establecimiento, incluso el mismo delegado Ramón Herebia tuvo que hacer las maniobras para que la circulación pidiera ser más ágil.

Por su parte algunos elementos de tránsito y otros más de la policía municipal mostraron su inconformidad, ya que dijeron que la gente no tenía derecho a manifestarse en un lugar que no es su municipio y mucho menos provocar un caos de este tipo en la entrada de la ciudad.