Inmiscuir los símbolos y las prácticas satánicas en la política, son conductas que nos deben de preocupar a todos los mexicanos, pareciera que quienes dirigen este país nos quieren inducir a la maldad, al nefasto obscurantismo y a la destrucción, en síntesis, a la decadencia espiritual y degradante de la raza humana.

La muerte es una alegoría de la enfermedad y de la violencia, de la destrucción y del final de todo lo tangible e intangible, desde luego no puede representar buenos propósitos, su sola invocación nos obliga instintivamente a persignarnos, a invocar la protección de Dios que en principios estrictos de la filosofía también fenece, como lo han hecho los antiguos dioses, que ya nadie recuerda ni adora.

Pero qué significará en política, si adoptamos como cierto que morir no tan solo es transformarse, sino que representa el principio de una nueva vida, será que anuncia un nuevo sistema político diferente al actual, o un renacer de lo pasado, no sabemos, pero los principales ideólogos del gobierno nos están mandando un mensaje escalofriante e intimidatorio de grueso calibre, que nos invita a reflexionar qué es lo que quieren decir, acaso que va a haber mucho más sangre que la que hasta ahora ha habido.


Sobre todo porque la llamada Santa Muerte es una secta que el imaginario popular identifica como una cofradía de gente mafiosa, que opera en las actividades más escabrosas, que portan la imagen como un arma exterminadora en cuyos templos solo falta que empalen formados los cráneos como trofeos a la manera de los Mexicas simulando el Zompantle en sus altares.

No es explicable que uno de los principales ideólogos de la Cuarta Transformación, entre ellos Genaro Villamil, titular del Sistema Público de Radiodifusión del Estado Mexicano, es quien presenta la imagen grabada en una playera con el símbolo de la santa muerte imponiendo silencio con el pulgar en los labios malignos y ordenando “Un verdadero hombre no habla mal de López Obrador”, con ello quiera imponer una clara distinción entre el bien y el mal o entre los buenos y los malos, lo grave es que lo permita el presidente, lo tolere y lo justifique con la libertad religiosa.

Ojalá y solo sea una sana e inocente ocurrencia, como la sucedida en el Senado de la República, en que un senador del mismo partido, celebró un ceremonial degollando una gallina y derramando su sangre al vez que sahumaba el ambiente y pronunciaba palabras propias de este ritual, actuando en el supuesto de que ésta es una ceremonia prehispánica, quién sabe de dónde sacaron la gallina los originarios de aquellos tiempos, pues ésta la trajeron los españoles en la conquista, lo que sí se sabe es que la gallina de color negro se utiliza en los rituales que celebran supuestos brujos.


En la huasteca septentrional, en donde raras veces tenemos acontecimientos trascendentes y dignos de reseñar, esta semana se estremeció con la presencia de las candidatas de la coalición formada por Morena, Partido Verde y PT, la doctora Claudia Sheinbaum y la ingeniero Rocío Nahle, pisaron primero Pánuco, luego Tantoyuca, para seguir en Tuxpan, “Ciudad que lo tiene todo”, dicho así por la candidata presidencial, seguramente convencida de que ésta es una población que se le entrega cada vez que la visita y le hace fiesta en grande, tanto que detalló en su descripción de trabajos futuros a realizar, la construcción de un gran puerto industrial, así como el desarrollo turístico, pesquero, comercial y agrícola, terminando triunfalmente en Álamo con los aplausos y algarabía de los vecinos, al mencionar la puerta de oro de la Huasteca Veracruzana, hizo sentir a la prospecto Morenista el indiscutible liderazgo que ejerce este bello puerto en la región gracias a la autoridad local que se esmera por servir y atender a los municipios y pobladores que la circundan.

Tuxpan le quitó el mal sabor de boca que se trajo de Pánuco, ciudad y distrito en el que los morenistas de arraigo reconocido e indiscutible trabajo político, no están representados en los puestos a elegir, experimentan una marginación lamentable por parte de los líderes de su partido que no los toman en cuenta, lo que es más, están molestos por la nominación de María del Carmen Pinete, mujer muy activa de la ciudad de Tantoyuca a la que sí aceptan. Lo que no digieren es que los liderazgos locales fueron desplazados para cumplir compromisos personales contraídos con el alcalde Oscar Guzmán de Paz, quien sin ningún recato impuso a su hija Denisse Guzmán González, como suplente en la diputación federal y obtuvo también por medios desconocidos una suplencia en la diputación federal plurinominal para su esposa la señora Maritza González. Hay que recordar que Don Oscar antes de ser Morenista fue presidente municipal por el PAN.

Peor el panorama en la designación de candidatos a la diputación local, aquí la lucha se dará entre puro panista de corazón, desde luego representando a la alianza Fuerza y Corazón por México va el licenciado y exdiputado federal Ricardo García Escalante, (Ricky) miembro de la familia García Guzmán, que dominó la política local por casi 20 años. Por Morena se registró la señora Begoña Canales Berumen, esposa del expresidente del Comité Municipal del PAN, Don Luis Robles, quien se desempeñó como regidor en el gobierno municipal panista que presidió Ricky, Fuerza por México postuló al exalcalde panuquense Don Fernando Molina, muy afín a Don Ricardo García Guzmán, cabeza del clan.


Así las cosas, cómo no van a resultar las cosas como sucedieron en la flamante plaza roja, en la que se cruzaron los cables de la hora, tanto que el acto tuvo que posponerse una hora para que llegara más gente, que llegó muy poca y la que estaba también en buen numero se aburrió y se fue, sin embargo fue un buen acto, pero no a la altura de lo que estamos acostumbrados a ver en las campañas presidenciales en que la plaza reboza y se hace insuficiente.

Antier en Tantoyuca la tranquilidad de la ciudad se vio alterada cuando las huestes de Don Celestino Rivera, asesor del municipio de Tempoal, irrumpieron desde las 3 de la tarde con una ruidosa manifestación por las calles de la ciudad vitoreando a Doña Claudia Sheinbaum, quien arribaría 4 horas más tarde, proveniente de Huejutla Hidalgo, a 40 minutos de distancia, lo hizo a ras de tierra, en un vehículo nada fuera de lo común, rebotando por las carreteras que siempre están en mal estado, así lo hizo durante toda la gira, lo que le hizo comprometerse, como lo hizo Andrés Manuel, Enrique Peña Nieto, Felipe Calderón, José Antonio Meade, Francisco Labastida Ochoa y cuanto candidato nos ha visitado.

Nos pareció que era otra Claudia, luciendo un atuendo típico, sin exageración, pero les confieso que luce muy bien de vestido y la verdad sus trajes formales de pantalón y vestido evitan que luzca su feminidad, era otra con un tono de discurso muy diferente, sin el tipleo Obradorista, lucia suelta y amena, así saludaba a los paisanos y sonreía, se tomaba selfies, posaba con los chalmeros que en buen numero encabezados por su presidente el líder y presidente municipal, don Jorge Flores Lara, lo mismo hacia con los de Chiconamel, con atención especial para los platonenses, encabezados por su presidente Guilebaldo Flores Lopez (Guilito) a quien le dispensó saludos y sonrisa, todos se esmeraron en organizar la bienvenida.


Pero gran parte de la ciudad estuvo ausente, ellos se encontraban reunidos en un acto que la candidata a diputada federal Rosario Guzmán Avilés, organizó simultáneamente en una avenida a 4 cuadras de donde estaba Claudia y a decir verdad el acto de Charito estuvo tan concurrido como el de Claudia, solo que la concentración de esta última fue regional y para la Presidencia de la República y la otra para una posición mucho menor, así se la gastan los de la Alianza de la fuerza y corazón, ya los veremos cuando nos visiten Xóchitl Gálvez y don Pepe Yunes, los 2 muy conocidos y queridos en la huasteca por el trabajo que desde tiempo atrás han hecho recorriendo y apoyando a las comunidades de toda la región, sobre todo de los pueblos originarios.

Finalmente, sin caer en el conservadurismo eclesiástico, tenemos que reflexionar muy seriamente en los graves problemas que enfrentaran las generaciones futuras, por las escasez de recursos y los numerosos compromisos económicos por los que atravesará la nación y el estado, esto sin importar a quien le toque gobernar, ya no hay de donde sacar recursos, no para obras nuevas, simplemente lo necesario para dar mantenimiento a las instalaciones y a la infraestructura del país, por fortuna nuestro pueblo trabajador y esperanzado, con quien sea saldrá adelante pero tendrá que realizar un gran esfuerzo, siempre en el camino del bien y sin el contagio de las poderosas fuerzas del mal que se alientan a todo vapor. Por el bien de la causa.