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Sección: Estado de Veracruz

Con esperanza, migrantes recibieron atenciones de orizabeños

- Comunidad católica ofreció comida y organizó jornada de oración

- Probablemente este lunes otro grupo de centroamericanos pase por el municipio

Lissette Hernández Orizaba, Ver. 12/11/2018

alcalorpolitico.com

Tal y como se los instruyó su maestro, es decir Cristo, la Pastoral Social de la Diócesis de Orizaba, apoyada por la comunidad católica, decidió ayudar a los migrantes que pasaron por el municipio y que se quedaron por una noche en esta ciudad.

Luego de haber descansado un poco, haberse bañado en el Complejo Deportivo de Orizaba Sur y tras probar alimentos, que por cierto fueron bastantes, pues diferentes parroquias se organizaron e hicieron la cena y desayuno que les compartieron a los hermanos centroamericanos, estos últimos fueron citados en una parte del complejo deportivo con la finalidad de elevar una oración, que inició el obispo de la Diócesis de Orizaba, Eduardo Cervantes Merino.

Bastó sólo un Padre Nuestro y un Ave María que fueron expresados desde lo más profundo del corazón, para que los migrantes no olvidarán que, como ellos dicen, Dios ha hecho milagros en sus vidas, incluso uno de ellos testimonió que gracias al Todopoderoso pudo salvar la vida cuando "los chicos malos allá en mi tierra me querían matar".



De igual forma, el Obispo les bendijo un par de lienzos con la imagen de la Virgen de Guadalupe plasmada en ellos.

Este pequeño momento de oración, dijeron, será de bien para su corazón durante todo el trayecto que aún tendrán que recorrer.

Pero no sólo ellos fueron tocados en su corazón, sino que también aquellos hombres y mujeres de buena voluntad qué decidieron sumarse al trabajo para atender a los migrantes, desde las parroquias de cierto decanato que se unieron para cooperar con el agua hasta los que decidieron recolectar los alimentos para prepararlos, sin dejar atrás a las mujeres que sirvieron de la manera más higiénica la comida, todo ello con la finalidad de dar el mejor servicio a los migrantes.



Las palabras de aliento para los migrantes vinieron de los encargados de la Pastoral Social; una palmada y una bendición de los sacerdotes y del Obispo fueron suficientes para alentar ese corazón que tiene un largo camino por recorrer.

También fueron bendecidos los pequeños que van en brazos y los niños que corrían en el CDO Sur sin saber a profundidad la realidad que están viviendo y quienes este lunes continuarán el trayecto junto con sus padres, que por cierto irán caminando hasta que encuentren a alguien que pueda darles un "jale" como ellos dicen.

La esperanza acompañada de lágrimas se observaba en los rostros de los migrantes, así como también las huellas de este trayecto largo que llevan, reflejadas en algunos padecimientos respiratorios. Algunos comenzaron a temblar de frío o por la fiebre que aquejaba sus cuerpos.



Este grupo seguirá su camino pero probablemente llegue otro este lunes o en los próximos días de la semana, lo cierto es que la Pastoral Social no se da por vencida y seguirá organizándose para servir al prójimo.