Con las reformas a la Ley de Salud, se suspendería la incapacidad por maternidad

Trabajadores del Sector Salud temen que las reformas a la Ley de Salud dejen indefensas a las mujeres embarazadas derechohabientes del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), pues afirmaron que la incapacidad de tres meses de la que gozan sería reducida o incluso suspendida.

Luis Alonso Mendoza, médico especialista del IMSS en Xalapa, refirió que de acuerdo a información que han obtenido, la trabajadora tampoco tendría derecho al pago de un subsidio por parte del Seguro Social equivalente al 100 por ciento del salario en que estuviera cotizando en el Instituto.

Recalcó que actualmente si el parto se adelanta y ocurre dentro del periodo de incapacidad prenatal y la asegurada no estuvo bajo control y tratamiento médico institucional durante el embarazo, el subsidio por la incapacidad postnatal se ajustará, descontando los días que se hubiesen traslapado con la prenatal, pero después de las reformas se les anularía el beneficio, aun cuando se violentan sus derechos a la salud.

Tampoco cuando el parto ocurra después de la fecha estimada por el médico del Seguro Social, el pago de dichos días será del 60 por ciento del salario registrado en el IMSS.

“La protección que se da cuando una persona se incapacita, es decir, la que recibe con la aportación del patrón, el gobierno, la institución y el mismo trabajador, también se puede perder”, insistió en entrevista.

El empleado de salud consideró que en caso de que así sea, se está quitando una protección esencial básica del ser humano, sobre todo a las mujeres que están embarazadas.

Dijo que la nueva Ley no defiende al ciudadano, sino a las instituciones y a las empresas, que se verían en la posibilidad de despedir a la trabajadora, aun cuando esté embarazada por el costo que representa contratar a una suplente mientras la madre pasa por el proceso pre y post operatorio.

Alonso Mendoza, quien se dijo temeroso de sufrir represalias al hacer estas declaraciones, también señaló que la nueva Ley de Salud contempla modificaciones en los cobros de los servicios de salud.

Se prevé que el IMSS sólo preste atención médica de primer nivel, pero los gastos médicos mayores correrán a cuenta de los derechohabientes.

Ejemplificó a los enfermos de males crónicodegenerativos, quienes no tendrán la posibilidad de surtir sus recetas para el tratamiento de por vida que requieren.

Lo mismo sucedería con pacientes de cáncer y VIH, aunque aquí la situación es más compleja, dado que los medicamentos son altamente costosos, por lo que para la mayoría resultaría casi imposible continuar con sus tratamientos.