La empresa cervecera
Constellation Brands niega el acceso a la planta en construcción de la localidad de Vargas en la ciudad de Veracruz a los socios de la Alianza de Transportistas de Veracruz (FATEV-CAT, CTM, CNC, CTC y CROM), advirtiendo que ya no cuentan con representación legal.
Los quejosos afirman fueron desplazados por la Confederación Autónoma de Trabajadores y Empleados de México (CATEM).
El representante de la Alianza de Transportistas de Veracruz, Cecilio Augusto Méndez Guerra, dijo que llevan ya tres días “de esta represión”, aun cuando los gobiernos federal, estatal y municipal, prometieron que el trabajo de la construcción de la planta cervecera sería para los veracruzanos y ahora se lo están dando sólo a un sindicato nacional.
En entrevista, Cecilio Augusto, especificó que fue a través de una llamada telefónica que el representante de la compañía cervecera Constellation Brands, les anunció que ya no pueden trabajar en la construcción de la planta porque supuestamente gente del gobierno estatal dio la instrucción de que las labores se asignen sólo a la CATEM.
“El día que nos presentamos por la planta, ya que no nos dieron acceso, ya tenemos tres días sin tener acceso a la planta, ya no nos quieren recibir y vía telefónica nos comunica Julio Munguía que las centrales obreras, que somos las que estamos participando en los hechos, no tenemos representación y no podemos trabajar”, declaró.
Sin embargo, Méndez Guerra precisó que la CATEM es un sindicato de mano de obra, no de transporte, además de que carece de representación en el municipio de Veracruz y traen unidades de otros municipios, a pesar de que los niveles de gobierno dijeron que el trabajo de la construcción de la planta cervecera sería para los veracruzanos, pero manifestó que los hechos demuestran lo contrario.
Advirtió que intentarán contactar a los representantes de la empresa cervecera para pedirles que les regresen el trabajo, ya que están afectando a miles de familias de la zona, no descartó acudir a un centro federal de conciliación.
“Estamos desplazados, estamos buscando a la empresa, la empresa no ha querido recibirnos, todavía tenemos adeudos, necesitamos cobrar y muy independiente de los cobros es el tema del trabajo, no puede ser que venga un sindicato a querer amedrentar a los sindicatos locales y queremos quitar el trabajo, que es prácticamente lo que están haciendo”, concluyó.