Debates no ayudan a cambiar preferencia en elección pero sí refuerzan simpatía de votantes

Más allá de proponer o plantear, los candidatos a la Gubernatura aprovecharán el próximo debate para evidenciar los defectos de sus adversarios; previó el académico del Centro de Investigaciones y Estudios Superiores en Antropología Social (CIESAS) Unidad Golfo, Felipe José Hevia de la Jara.

Ante esa lógica de contrastar, los debatientes buscan exhibir los errores, problemas y pifias de los demás candidatos y no generar políticas, aseveró.

Todo lo anterior, como una antesala del ejercicio de debate previsto para el 18 de este mes, en el World Trade Center de Boca del Río.



Asimismo, interpretó esto como una herencia de la cultura política en México, en donde se valora y se premia la agilidad mental de los candidatos y su capacidad de "ser vivos".

"Un candidato tiene que pasar por dicho proceso, mostrarse ágil de mente, con capacidad de responder los golpes y dar golpes; ene so terminan los debates, son un juego de finta contra finta y juego verbal", previó.

Desde su punto de vista y de acuerdo con la experiencia, los debates no ayudan mucho a cambiar la preferencia en una elección; aunque refuerzan la simpatía de los votantes por su favorito.



"Son eventos comunicativos en los que le hablan a los partidarios, no a los adversarios", expresó.

Si bien fue incisivo en que el debate se constituye en un acto de comunicación, destacó también el hecho de que permite contrastar las diferencias entre una y otra propuesta o perfil.

"Y en Veracruz va a ser muy interesante contrastar propuestas en discusión, independientemente de cómo 'llegan' según las encuestas publicadas y oficiales", enfatizó el académico. Así, el participante de los debates desarrollaría una función básica de mostrarse a los leales y mostrarse hábil.



Evitó detallar qué candidato se encuentra mejor posicionado, aunque coincidió en que los dos punteros son Miguel Ángel Yunes Márquez y Cuitláhuac García Jiménez. Asimismo, reconoció que José Francisco Yunes Zorrilla ocuparía un tercer lugar y pidió no descartarlo, por la amplia experiencia del PRI en movilización electoral.

"En términos de posicionamiento no hay un liderazgo claro ni un candidato al que los demás se van a apegar", finalizó.