Defensor de migrantes acusa abandono de la CNDH a este grupo

El panorama que se vislumbra para el próximo sexenio en materia de migrantes es de maltrato y cierres de casas de ayuda para este sector, advirtió Fray Tomás González, responsable del refugio para indocumentados en Tenosique, quien agregó que en este momento se vive una crisis humanitaria, pues tan solo en el estado hay alrededor de 1 mil centroamericanos y en todo el país un promedio de 3 mil, sin poder irse al país del norte.

Dijo que el cierre del refugio para migrantes en Lechería, es el principio de un ciclo de cierres de casas de migrantes “es el primer ramalazo de este nuevo sistema de gobierno, así lo vemos nosotros, porque aunque no viene del Presidente electo, porque sería un atrevimiento decirlo, sí viene una lluvia de cierre de casas, de violación a los derechos humanos y más”.

De hecho puntualizó que autoridades de todos los niveles prometieron que ayudarían a la casa de San Juan Diego, Lechería, pero no cumplieron, incluso se comprometieron a que la reubicarían, pero todo acabó en que mejor se cerró la casa.

“Hubo abandono de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos, las autoridades no cumplieron con reubicar el refugio, y esto es obligación del gobierno; la iglesia y la sociedad civil estamos poniendo nuestro granito de arena pero estamos haciendo un trabajo que no nos corresponde”.

En entrevista vía telefónica expresó que el hecho de que no hay una política migratoria verdadera en México, ha dado como resultado todo lo que en este momento se sigue viendo en contra de los migrantes.

Al respecto, se le cuestionó si se hará una petición al presidente electo, Enrique Peña Nieto, a lo que indicó: “damos por sentado que conoce la situación, él es mexicano y debe conocer la realidad que se vive. Personalmente le pido que se diseñe una verdadera política migratoria humanitaria y no subsidiaria de la de Estados Unidos, que permita tratar a todos como lo que son: seres humanos”.

Y aclaró: “no somos revolucionarios sin causa, ni hijos desobedientes a un sistema, somos gente que sabe dialogar, somos gente de mucha esperanza y fe y acudiremos a las instituciones de este país, aun cuando estén llenas de corrupción”.

Por ello, acentuó que vislumbran un panorama difícil para los migrantes en el próximo sexenio, en el cual presienten que habrá muchas violaciones, en este sentido acotó que la situación de los migrantes que están varados, es mucho más difícil, incluso que estiman que están parados un promedio de mil en el territorio veracruzano y en todo el país alrededor de 3 mil.

“En toda la ruta sur, calculamos que hay más de tres mil. Nuestra puesta está en las casas del migrante, en la sociedad civil, en los defensores de derechos humanos, en los medios de comunicación libres, para hacer un llamado a la sociedad, que por cierto se ha logrado, hemos tenido reporte de que la gente en esta caminata que ellos hacen desde Coatzacoalcos, está saliendo a dar agua, incluso hay gente que da a los migrantes”.

Del regreso del padre Alejandro Solalinde a México, añadió que él desde lejos estuvo trabajando; pero que ya les hacía falta en persona a todos los que trabajan en pro de los migrantes “ya queríamos al padre Solalinde en presencia. Ymira, el Gobierno Federal ha tenido un doble discurso, porque decían que tenían un rostro humanitario pero por el otro lado había persecución, una vez que iniciaron las campañas el tema migratorio se abandonó”.

En este sentido, dijo que el Presidente de la República tendrá que rendir cuentas por las 60 mil personas muertas durante su sexenio, millones de personas en pobreza, la salida de cientos de mexicanos en busca del sueño americano y paso de centroamericanos por territorio mexicano que han muerto o han sido violentados sus derechos.