Denuncia negligencia en Clínica 11 y tardanza de CODAMEVER para atender su caso

IMSS antesala del infierno

CODAMEVER, fracaso total para dirimir quejas

Señor Director:



Solicito a usted tenga la amabilidad para dar a conocer a través de su prestigiado medio un hecho que estoy viviendo y donde dos instituciones creadas con nobles fines se articulan para hacerme desistir en mi exigencia de un trato digno y el respeto de los más elementales derechos humanos de mi esposo, el señor Juventino Carrillo Pérez, quien tuvo que ser hospitalizado en la Clínica número 11 del IMSS de esta ciudad de Xalapa el pasado día 24 de mayo de 2013.

Mi marido llegó con desorientación al área de urgencias y no me permitieron estar a su lado, no tomando en cuenta la advertencia que les di cuando les indiqué que él depende de mí en un 80 por ciento para valerse de sus más elementales necesidades.

Me apartaron de él de las 4:00 de la tarde hasta las 10:30 de la noche del día 24 de mayo de 2013. Al estar solo, se les cayó y se fracturó la cadera y, como consecuencia, no podrá volver a caminar. Mi esposo aún podía caminar un poco deteniéndose de la pared o de los muebles o lo que estuviera a su alcance para llegar a su lugar favorito, el patio de la casa.



El día que llevé a mi esposo a urgencias, su micción no requería ayuda de ningún aparato ni de sonda y, a partir de la caída, empezó a arrojar sangre en el hospital y me dijeron que esa sangre no era por el golpe, sino por el daño renal que ya padecía, apresurándose a la cirugía de catéter que según ellos era más importante que atender la fractura que se ocasionó en ese lugar.

Derivado del descuido del personal del Instituto Mexicano del Seguro Social Clínica 11, área de Urgencias Primer Contacto Turno Vespertino, tuve que verme obligada a firmar la autorización para la primera intervención quirúrgica de catéter para diálisis.

El sábado 25 de mayo por la tarde, un médico internista me dijo que agilizaría lo que estuviera a su alcance para localizar al anestesiólogo, pero que me mantuviera callada, pues sabía que yo tenía intenciones de poner una demanda.



Hasta el Domingo 26 de mayo de 2013, hasta ese día no sabía yo quién era el anestesiólogo y el traumatólogo que atenderían a mi marido.

A mi esposo en total le han realizado dos intervenciones y aún falta una tercera. ¡Su nefrólogo y el urólogo indicaron que no era candidato a ninguna intervención quirúrgica! ¿Qué debo hacer para que los directivos del Seguro Social agilicen el procedimiento adecuado y presten auxilio al paciente que por negligencia del personal en turno, imprudentemente dejaron que se cayera y se ocasionara una lesión tan peligrosa?, ¿cree usted que deban seguir sucediendo más accidentes como este?, ¿a caso vamos a estar expuestos a que nos continúen dando un trato injusto, indiferente, intolerante, e irresponsable?, ¿en manos de qué personas estamos exponiendo la vida de nuestras familias? Las cuales venimos con la esperanza de que nos ayuden a tratar de mejorar un poco las enfermedades que en un momento nos aquejan y salga peor el remedio que la medicina.

Señor director de este valioso medio informativo, la Comisión de Arbitraje Médico del Estado de Veracruz (CODAMEVER), órgano desconcentrado de la Secretaría de Salud y Asistencia del Estado de Veracruz, ha sido informada de esta situación y he hecho llegar al doctor Emilio Stadelmann López, Comisionado de Arbitraje Médico del Estado de Veracruz, este caso que hoy hago público.



En su oficio de respuesta me otorgan el número de queja 5207Q4313 y me dicen vía telefónica que en 3 meses el IMSS responderá a este señalamiento interpuesto en su contra.

Lo que me hace sentir decepcionada de esta institución creada para atender, investigar y resolver quejas derivadas de la atención médica del IMSS y de la CODAMEVER, órgano burocrático y elefante blanco, cuyo diseño abona al tortuoso y lento trámite que reciben las quejas. Ya que en este caso, se trata de minutos los que pueden ser la diferencia entre la vida y la muerte de mi esposo.

Mi esposo empieza a tener llagas, por lo cual solicité un colchón de agua para que estuviera más cómodo, ya que las enfermeras han pedido que mi esposo mueva las piernas, no importándoles el dolor por las cirugías recientes. Me dijeron que le pondrían uno, y después me informan que yo debo comprar el colchón de agua.



Con el sueldo escaso de mi esposo, apenas puedo terminar el mes. La imprudencia del personal le ocasiona daños a mi marido y yo debo pagar los gastos extras. Médicos y enfermeras, salvo algunas excepciones, repiten que no hay culpables en este caso. Yo, afirmo lo contrario.

Señor Director, el ciudadano común está en total indefensión ante estas instancias que se observan, diseñadas para desistir en la búsqueda de nuestros derechos. Exijo al Gobernador del Estado Javier Duarte de Ochoa y al Secretario de Salud Juan Antonio Nemi Dib su rápida intervención ya que la CODMEVER depende de la SSA.

Exijo:
-Que se investigue este accidente.
-Indemnización y reembolso de gastos que se generen a partir de la fractura de cadera y demás daños ocasionados.
-Que se deslinden responsabilidades.
-Solicito le den un servicio de calidad, profesional, humano y urgente.
-Que los gastos derivados de este suceso los absorba plenamente el Seguro Social porque ya me están pidiendo toallas faciales, sangre y lo que en el futuro se requiera.
-Si en el seguro social no hay las condiciones adecuadas para su tratamiento, solicito lo envíen a un hospital que tenga mejor atención en su servicio.



Xalapa, Enríquez, Ver. a 8 de junio de 2013

Atentamente

Eleanaara Núñez Silvestre



Esposa del afectado por el mal servicio del IMSS, el señor Juventino Carrillo Pérez

Le proporciono mi número de celular (...) Mi esposo aun está hospitalizado en la Clinica 11 y a veces no llega la señal. Si no me puede localizar por teléfono, contácteme por favor a este correo electrónico de (...). No puedo escanear acuse de recibo porque mis trámites ante la CODAMEVER han sido vía electrónica y por teléfono, pero le envió mi escrito en word para que pueda usted leer sobre el caso de mi esposo.

Hasta pronto



Eleanaara Núñez Silvestre