“El fraccionamiento Floresta no tiene solución” gritó el gobernador del estado, Fidel Herrera Beltrán, luego de conversar por más de hora y media con los vecinos de este lugar que se mantiene inundado desde el pasado sábado, por lo que les propuso vender sus casas, luego de un evalúo donde participará el Colegio de Evaluadores, así como el de Ingenieros Civiles.
Durante la llegada del gobernador al Floresta, hubo forcejeos entre los propios vecinos, discusiones muy acaloradas entre éstos, algunos identificados con el PAN, otros con el PRI, pero también gente sin ninguna liga política que igualmente quería que se resolviera ya el problema de la inundación en este lugar.
“Con la situación que estamos pasando del cambio climático, esta será la historia de siempre” de inundarse en este lugar, por lo que dio conocer que planteará al gobierno federal la alternativa de la compra de esas casas para destruirlas dejando que este punto sea un lago natural como lo era hace cincuenta años, esto por medio un mecanismo adecuado.
Durante el encuentro con el mandatario varios vecinos le recordaron que el entonces presidente de la República, Vicente Fox les dijo en visita al puerto que nunca más se inundaría ahí, esto fue en el 2005, por medio de un proyecto hidrológico.
El huracán “Karl” no tiene procedente en nuestra historia, el sistema hidráulico era insuficiente, se tenía una capacidad de 230 metros cúbicos y con el Huracán se tuvo 2 mil 300, es una mega hecatombe, les explicó el gobernador.
“No quiero que una vez que todo esté seco se resistan, esto es un vaso regulador de Veracruz, se acabó la historia, un error grave que no respetó a la naturaleza, por eso impulsaremos un programa para devolverle a la naturaleza la laguna y a ustedes la tranquilidad”.
“Por muchas obras que se puedan hacer aquí esto se va a inundar, no tiene solución, no tiene solución”
Anunció el gobernador que este día se pondrían en marcha bombas para disminuir el nivel del agua en el Floresta, donde se estima que estén más de dos mil viviendas.
Durante el periodo de estadía del gobernador, escuchó de todo, desde críticas, hasta aplausos, además de que hubo empujones y forcejeos, además de que muchos vecinos vieron con malos ojos que reporteros o camarógrafos se pusieran cerca del gobernador, cuando no eran vecinos afectados.
Herrera Beltrán le pidió a reporteros que primero escucharía a los vecinos y luego ya la entrevista.